La fiscalía se querella contra Sito Pons por fraude fiscal

Los tribunales y la inspección persiguen a los morosos y a los defraudadores. Y hace unos pocos años decidieron no pasar ni una a los deportistas de élite o personajes públicos. Las grandes figuras del deporte, como Messi o Neymar, muy de actualidad estos días, hacen que resuenen con más fuerza otras investigaciones, como la que se conoció ayer: la Fiscalía de Delitos Económicos de Barcelona ha presentado una querella contra el expiloto Sito Pons, campeón del mundo de 250cc en 1988 y 1989, acusado de defraudar un total de 445.992 euros al no efectuar la declaración del IRPF y alegar falsamente que residía en Mónaco. El titular del juzgado de instrucción número 8 de Barcelona ha admitido a trámite la querella.

El ministerio público sostiene que Pons ha venido simulando desde el año 1988 que residía en el extranjero, primero en Mónaco y a partir de 2013 en Reino Unido, “con la exclusiva finalidad de eludir el cumplimiento de sus obligaciones fiscales en España”.

Pese a declarar que vivía en el extranjero, la fiscalía sostiene que Pons residió de forma “efectiva y de manera habitual” en su domicilio de Barcelona durante todo el año 2010, en el que no presentó declaración del IRPF, por lo que dejó de ingresar a la Agencia Tributaria un total de 445.992 euros. De ahí, deduce la fiscal Carmen Martín Anglada, el piloto produce “un perjuicio económico a la Hacienda Pública por este mismo importe”.

La querella expone que la principal actividad que desempeñaba Sito Pons en 2010, ejercicio por el que no pagó los impuestos que le correspondían y por la que percibía sus ingresos, era la gestión de una escudería de motociclismo y automovilismo (en el Mundial de Moto2 y en las World Series by Renault, respectivamente) que giraba bajo el nombre de Pons Racing. La gestión de esta empresa, según la propia fiscalía, se realizaba desde unas oficinas ubicadas en la población de Castellbisbal (Barcelona).

El que fuera campeón del mundo de 250cc alquiló una vivienda en Mónaco y contrató un seguro de hogar, con lo que consiguió que las autoridades monegascas le concediesen el permiso de residencia. Sin embargo, según la querella, no constan consumos de agua ni de luz que concuerden con la presencia de una o varias personas residiendo en el inmueble. En el periodo en el que Sito Pons fue, supuestamente, residente monegasco tan solo hay constancia de que el ahora empresario estuviera en el país de visita coincidiendo con algún evento deportivo.

Por todo ello, la acusación sostiene que Sito Pons residía en Barcelona y que utilizaba de forma habitual el aeropuerto de El Prat, en la capital catalana, para acudir a las distintas competiciones del Mundial de motociclismo y de las series de automovilismo. La fiscal también sostiene que Pons se sirvió de un entramado de empresas, algunas radicadas en paraísos fiscales, que creó con la ayuda de asesores que también figuran como acusados.