El Barça queda en evidencia en Moscú

El Barcelona se ha convertido en un felino malherido. Es capaz de soltar un par de zarpazos, jugar seis minutos espléndidos, dejar patitieso a todo un CSKA de Moscú y endosarle un parcial de 4-18 en el fragor de la batalla. Pero este Barcelona errático, que pugna por encontrar un equipo fiable y consistente, es capaz también de los mayores desastres. El CSKA de Ettore Messina salió del atolladero con la misma autoridad con la que había alcanzado una apreciable ventaja al llegar al descanso (42-31). La reacción azulgrana llegó de la mano de Oleson, que reapareció tras dos meses lesionado y debutó con el Barça en la Euroliga, y también de Sada. Dos inesperados revulsivos, como corresponde a un equipo desconcertante y desconcertado.

Pero fue un visto y no visto. El CSKA, de la mano de Krstic, Weems y Jackson, metió la directa. Y el Barcelona se desplomó. Sufrió por igual en defensa y en ataque. No encuentra un guion que le permita asentarse en ambos lados de la cancha. Cuando no sucumbe en su defensa del perímetro es permisivo con las penetraciones de sus rivales y concede canastas fáciles. Cuando no le falta velocidad y sincronización en ataque, se obceca quemando un exceso de pólvora con los triples.

Todo va a trompicones. Navarro solo anotó un punto en la primera parte y luego se entonó. Ausentes Papanikolaou, con gripe, y Lorbek, todavía renqueante tras su larga ausencia después de ser operado de una rodilla, Pascual incluyó a Hezonja en el quinteto titular. Cumplió el joven croata, pero no se vio favorecido por la falta de contundencia de Nachbar, más necesaria que nunca para contener al fortachón Hines. Marcelinho no consiguió encender el motor de arranque, Dorsey sumó cuatro faltas en nueve minutos, Pullen es limitado en lo que hace y en los minutos que se le dan, Abrines y Todorovic podría decirse que se pierden en la nebulosa azulgrana y de Lampe no hay noticias.

Perdió el Barcelona por 14 puntos, cinco más de la que le permitía la renta que obtuvo en el Palau. Si el CSKA gana al Partizán en la última jornada, el Barcelona concluirá en la tercera posición.