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Fumata blanca en la NBA

David Stern llega a un acuerdo con los árbritros para que pongan fin a su huelga

Los árbitros profesionales y la NBA firmaron la pasada noche un nuevo convenio laboral por dos años que puso fin a la huelga que mantenían desde hacía casi un mes. Como anticipó horas antes el comisionado de la NBA, David Stern, en una videoconferencia, ambas partes habían acercado sus posiciones para superar las diferencias y llegar al acuerdo definitivo. La firma del nuevo contrato laboral permitirá a los árbitros comenzar a trabajar a partir del próximo martes cuando dé comienzo de manera oficial la nueva temporada.

El propio Stern, que había abandonado las negociaciones antes que diese comienzo la pretemporada, volvió a reencontrarse con el máximo representante del sindicato, Lamell McMorris, y la pasada noche, en en las oficinas centrales de la NBA, ambas partes hicieron las paces con la firma del nuevo contrato. La noticia colmó de satisfacción a entrenadores y jugadores que durante la pretemporada se quejaron en privado y algunos en público del "bajo" nivel que tenían los árbitros sustitutos que utilizó la NBA para ocupar el puesto de los profesionales.

El acuerdo pone fin a casi un mes de huelga, y los 57 árbitros profesionales tienen previsto reunirse este fin de semana, en Nueva Jersey, para hacer un campo de entrenamiento corto, y recibir las asignaciones que le correspondan a cada uno con vistas al comienzo el próximo martes de la competición regular. Ninguna de las partes ha querido dar a conocer el contenido del acuerdo y cómo había sido la votación final y se han limitado a expresar la satisfacción de haber conseguido superar el enfrentamiento laboral.

"Estamos complacidos con haber llegado a este acuerdo", señaló Stern, a través de un comunicado. "Las negociaciones se extendieron más de lo que ambas partes hubieran deseado pero cuando comience el martes nuestra temporada regular, tendremos a los mejores árbitros del mundo supervisando nuestros partidos", agregó el comisionado. Por su parte, el sindicato de árbitros no formuló comentarios, ni tampoco lo hizo McMorris, el hombre fuerte que les representó en las negociaciones.

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