_
_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Tronos

Me preparo para el gran banquete con 'Juego de tronos' en una noche venturosa

En vídeo, tráiler de la última temporada de 'Juego de tronos'.Vídeo: HBO
Carlos Boyero
Más información
Buitres
Dylan
En vilo

Aunque mi vida social sea casi inexistente y solo me dedique a la épica y dura tarea de intentar soportarme, de vez en cuando hablo con otras personas e invariablemente citan con síntomas de encantamiento y terror una serie titulada Chernobyl. Y me miran con estupor cuando respondo que no la he visto. La exhibe HBO y mi patológica incapacidad para disponer de tabletas, ordenador, smartphone,esas cosas tan sabias e imprescindibles (hasta los bebés están convencidos de ello) para vivir o sobrevivir, no me permite acceder a la indiscutible reina de las series, a la calidad como norma. Guardo con mimo esas ficciones mitológicas en formatos de DVD y Blue-ray, pero ya es un mundo en agonía. También anacrónico según los infinitos yonquis de las nuevas tecnologías.

Pero dispongo desde hace un tiempo de una televisión que asegura ser inteligente y que con frecuencia me vuelve loco. En ella veo Movistar y Netflix. Y en la programación de la primera anunciaban la última temporada de Juego de tronos, mi mayor anhelo, a partir de un determinado día de junio. Y me preparo para el gran banquete en una noche venturosa.

El primer capítulo solo es discreto. Me encanta el segundo. Gente convencida de que al día siguiente puede o va a morir, con tanto miedo como determinación, haciéndose confidencias íntimas, recordando, emborrachándose. Y la batalla del tercero es puro espectáculo. Le acusan de ser oscuro, de que no se ve nada. En mi tele sí. Ha llegado el invierno y la inacabable noche. ¿Qué esperaban los decepcionados, luminosidad? Y ya no puedo ver más capítulos. Un rótulo me informa de que a mitad de julio exhibirán los tres restantes. Y me encabrono, me siento estafado.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_