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Columna
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El momentazo

“Hay que hablar del cine español, de lo bien que está el cine español”, cuenta con euforia la cómica Silvia Abril, copresentadora mañana de los premios Goya

Silvia Abril y Andreu Buenafuente, en el festival de Vitoria de televisión.
Silvia Abril y Andreu Buenafuente, en el festival de Vitoria de televisión.Getty Images

“Hay que hablar del cine español, de lo bien que está el cine español”, señaló con euforia la cómica Silvia Abril en una tertulia del programa de TVE2 Versión española, como anuncio previo a los Goya de mañana, cuya ceremonia presentará ella misma en compañía de su pareja, el veterano Andreu Buenafuente. Lo supuestamente bien que está el cine español fue recalcado por la presentadora del programa, la siempre entusiasta Cayetana Guillén Cuervo, definiéndolo como el “momentazo” que estamos viviendo, refiriéndose a los éxitos puntuales que durante este año han tenido algunas películas. “El cine español no es un género”, dijo, “sino un montón de cabezas distintas que piensan y transmiten su sabiduría y sus conocimientos”. Ahí quedó la cosa. Por su parte, Buenafuente, más pragmático, insistía en lo bueno que aparezcan películas españolas “con autoría y sensibilidad” frente a las americanas de superhéroes. “Hay que empujar todo el rato”.

Así pues, estamos viviendo un momento de euforia, de optimismo oficial que celebra que el cine español se haya mantenido en cuotas de consumo similares a las del año anterior, es decir, sin bajarlas, y también ante la buena reputación de unas cuantas películas que ahora acaparan premios aunque, lo que son las cosas, en buena parte no despertaran la atención del público. Pero viene bien esta alegría nacional que presagia para mañana una feliz ceremonia endogámica, lejos en buena parte de aquella funesta época en que los Goya eran ocasión para el lamento por las escasas ayudas oficiales aburriendo a las ovejas y desanimando al público.

Este año se anuncian risas y risas a pesar de lo peligrosas que suelen ser cuando se fuerzan a base de payasadas y mal gusto, lo que ojalá no ocurra. En su lugar, quizás haya ese buen humor sin chuscadas que ha solido escasear en los Goya aunque, eso sí, llevándose siempre la palma (la Sardá, Dani Rovira. Buenafuente…). A este último le advirtieron en una de las ocasiones en que fue presentador: “Hagas lo que hagas te van a poner a parir”, y esa premisa sigue valiendo. Puede que este año algo menos gracias al “momentazo” que al parece estamos disfrutando. Sea como sea, que nos coja confesados.

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