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Columna
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La travesía póstuma de ‘Lost’

La serie de 'The Crossing' sucumbe ante todos los clichés del guionista veterano y resabiado

Fotograma de 'The Crossing'.
Fotograma de 'The Crossing'.

Habrían hecho bien J. J. Abrams y Damon Lindelof en acabar Lost con un fundido a negro como hizo David Chase en Los Soprano. Quizá no se habrían ahorrado la rabia de los adeptos que durante seis temporadas buscaron respuestas a enigmas inescrutables, pero puede que hubieran conjurado los intentos posteriores de crear otra serie de misterio metafísico-poliédrico. Han pasado 13 años desde su estreno en ABC y la cadena todavía utiliza el señuelo de Lost para promocionar nuevas ficciones. La última, La travesía (The Crossing) estrenada en España por HBO. Arranca con supervivientes tendidos en la arena de una playa y propone viajes en el tiempo, pero poco tiene que ver con las aventuras de los abducidos por Dharma. O con su tensión adictiva.

La plácida vida de un pueblecito de Oregón se ve perturbada por la llegada masiva de un grupo de náufragos a los que no se les conoce barco. No tardamos en descubrir que son refugiados, no de otro país, sino del futuro. Huyen de un genocidio contra la humanidad. La travesía sucumbe ante todos los clichés del guionista veterano y resabiado: sheriff local de vida familiar complicada que se desvive por investigar; hermosa agente de Seguridad Nacional que defiende su cotarro; hipnótica niña de cabellos dorados a la que solo le falta decir “ya están aquí”, para consagrarse como heredera de Carol Anne...

Pero de todos los tópicos, el peor es dibujar una raza superior, genéticamente modificada, que, sin embargo, es de una maldad aniquiladora. Nunca imaginamos a los robots o los suprahumanos que pueden poblar el futuro como seres bondadosos. Siempre son entes demoniacos que nos quieren arrasar. Cuánto mejor sería fantasear con androides sabios y virtuosos. Que tuvieran, por ejemplo, la capacidad de escribir esa ficción mítica que buscan las cadenas como si se tratara del Santo Grial: un nuevo Lost con respuestas a las preguntas que quedaron sin contestar.

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