_
_
_
_
_

Michael Kenneth Williams: “Mis cicatrices son casi todo internas”

El actor de ‘The Wire’ se emociona en Canneseries recordando un pasado que ahora usa para ayudar a las nuevas generaciones. Y Phoebe Waller-Bridge estrena ‘Killing Eve’

Michael Kenneth Williams posa en el Festival de Cannes.
Michael Kenneth Williams posa en el Festival de Cannes.Pascal Le Segretain (Getty)

La famosa cicatriz de su rostro. A ratos la misma sonrisa. Y poco más. A Michael Kenneth Williams no le queda nada más del personaje que lo hizo famoso hace 16 años, Omar Little, en The Wire. El actor visita por primera vez Francia, y lo ha hecho por la puerta grande, como jurado del nuevo festival Canneseries. En su primera aparición, llevaba un jersey con un dulce osito de peluche bordado. En la segunda, el lunes por la tarde durante una masterclass organizada para repasar su carrera en televisión, Williams ha mostrado su cara más sensible y activista. “Ser activista es ser un adulto”, ha dicho sin dar importancia a su labor.

La charla empezó con un Michael K. Williams emocionado mirando una foto aérea del complejo de casas sociales en las que nació y creció “los primeros 32 años” de su vida, en el barrio de Flatbush, en Brooklyn. “A pesar de todo lo feo y malo, no cambiaría mi vida por nada, me hizo quién soy. Estoy orgulloso de decir que crecí en estas calles de Brooklyn. Tengo algunas cicatrices, casi todas internas, pero me hizo el hombre que soy”, ha explicado emocionado. Y su éxito, asegura, no fue abandonar esas calles, sino volver a ellas.

“¿Por qué nos dicen que el éxito es salir de ahí y nunca volver, nunca mirar atrás, nunca volver a relacionarte con eso?”, se ha preguntado. Él, que en su juventud evitó la cárcel y vender drogas, porque era “raro” y gracias a su madre, pero que intentando encajar sí las consumió hasta entrar en rehabilitación con solo 21 años y en la siguiente década vivió el tiempo más oscuro de su vida, sin casa, sin interés por nada y de pelea en pelea (de donde salen las cicatrices exteriores). Él, que ha evitado el destino para el que esas calles están diseñadas, sabe que el éxito es justo lo contrario. “Durante mi tiempo en The Wire me di cuenta de que el éxito no es salir de tu comunidad, es ser bienvenido de nuevo”, dijo.

Cuando volvió y sus amigos y vecinos le decían “Sigue haciendo lo que estás haciendo, hermano”, “Estamos orgullosos de ti”. Vio que se rompía un estereotipo, que su comunidad se volcaba con él. “Eso me cambió para siempre. Para mí, éxito es llegar hasta aquí saliendo de un lugar diseñado para el fracaso y volver a él”.

El baile fue lo primero que le salvó, después el cine, gracias a la oportunidad que le dio Tupac Shakur, y, al final, la televisión. De The Wire a Boardwalk Empire y las últimas, The Night Of o When We Rise. Ha contado que colgó sus zapatillas de baile, precisamente, el día de la audición con Martin Scorsese cuando el veterano director dijo que “era un buen actor, que le dieran cualquier papel”. Así se lo creyó. Y ahora compagina su trabajo como actor (acaba de estrenar nueva temporada de Hap and Leonard y tiene tres películas en proyecto) con el de productor de series documentales en las que está devolviendo a su comunidad todo lo que él aprendió dentro y fuera de ella. Como Raised in the System, que estrenaba este fin de semana en HBO, resultado de dos años recorriendo las cárceles para hablar con chavales que han ido directos del aula a la celda. Su objetivo ahora es seguir trabajando y dando trabajo a estos jóvenes, “dejar migas para las siguientes generaciones”.

De lo único que no pudo hablar Michael K. Williams fue de las series que está viendo estos días en Cannes como jurado. Horas antes de su charla, Phoebe Waller-Bridge presentaba una de las que más ruido ha despertado, Killing Eve. Alejada de Fleabag en forma, pero cerca en su intención de “poner ahí fuera mujeres reales”, explicó.

La gran serie del fútbol

Después de dos días de Canneseries, el lunes arrancaba también MIPTV oficialmente, llenándose de compradores, vendedores y creadores de todo el mundo. Pero horas antes de este inicio, la distribuidora Beta Film y Red Bull Media House anunciaban uno de los proyectos más grandes que saldrá de esta edición: la serie The Net. Una coproducción entre las dos empresas, a partir de la idea de Matthais Hartmann y Plinio Bachmann, que girará alrededor del "lado oscuro del negocio del fútbol". Dividida en cinco temporadas de ocho episodios cada una, cada temporada se producirá y creará en un país distinto de Europa. Y cada temporada y cada país tratarían un tema: desde el dopaje a la corrupción. No se verán partidos, sino todo lo que ocurre detrás, no se nombrará a la FIFA, ni habrá personajes reales, pero sí inspirados en la realidad y muy reconocibles. El objetivo es estrenar las cinco a la vez, y por ahora buscan socios y guionistas por países.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_