Lo peor del año en cine se titula ‘Emoji: la película’

Justo cuando se celebra la excelencia del cine con la entrega de los Oscar, los premios Razzie regresaron un nuevo año recordando lo peor del séptimo arte. Y este año la peor película se titula Emoji: la película. El filme animado tuvo el dudoso honor de ganar el galardón a peor largometraje. El escarnio no quedó ahí. El filme dirigida por Tony Leondis y producida por los estudios Sony obtuvo otros tres galardones: peor guion, peor dirección y peor combo de cualquiera de sus “insoportables personajes”.

La película transcurre en Textopolis, ciudad digital en la que viven los emojis o emoticones y donde uno de ellos es perseguido por querer tener más de una expresión. Irónicamente y pese a las terribles críticas que recibió el filme desde su llegada a las pantallas, la producción con un presupuesto de 40 millones de euros consiguió amasar 200 millones de euros en la taquilla mundial en salas.

Los premios Razzie, también conocidos como premios “pedorreta”, celebran este año su 38ª edición. Aunque su profesionalidad es dudosa, entre otras razones porque nunca explican quiénes son los miembros del jurado que eligen nominados y ganadores, su oportunismo, anunciados el día antes de la entrega de los Oscar, sirve para ofrecer un momento de humor en una industria que en estas fechas se toma demasiado en serio.

La estatuilla, que consiste en una mora pintada de dorado sobre una lata de película, premia por igual a estrellas o desconocidos e incluso se preocupa por reflejar la diversidad de Hollywood. De ahí que el premio a peor actor de este año fue para Tom Cruise. La superestrella estadounidense se declaró vencedor en una categoría de pesos pesados en la industria como Johnny Depp (por Piratas del Caribe: la venganza de Salazar), Jamie Dornan (Cincuenta sombras más oscuras), Zac Efron (Los vigilantes de la playa) y Mark Wahlberg, que hacía doblete con Guerra de papás 2 y Transformers: el último caballero.

Cruise se alzó con el Razzie gracias al trabajo realizado en La momia, filme que estaba entre los nominados a peor película al igual que Cincuenta sombras más oscuras, Los vigilantes de la playa y Transformers: el último caballero. El galardón a peor actriz fue para Tyler Perry, que vuelve a tranvestirse como su personaje Medea en BOO! 2: A Madea Halloween. El resto de las nominadas en esta categoría fueron las actrices Katherine Heigl (Unforgettable), Dakota Johnson (Cincuenta sombras más oscuras), Jennifer Lawrence (Mother!) y Emma Watson (El círculo).

Cincuenta sombras más oscuras se llevó los trofeos a peor actriz secundaria, para Kim Basinger, y peor secuela. Basinger competía con Sofia Boutella (La momia), Laura Haddock (Transformers: el último caballero), Goldie Hawn (Descontroladas) y Susan Sarandon (A Bad Moms Christmas).

Finalmente, Mel Gibson recibió el Razzie como peor actor de reparto por su trabajo como el padre rebelde en Guerra de papás 2. Su victoria dejó a Javier Bardem sin ese honor al que aspiraba como doble nominado por Piratas del Caribe: la venganza de Salazar y Mother!. Completaban la categoría Russell Crowe con La momia, Josh Duhamel con Transformers: el último caballero y Anthony Hopkins también por esta misma película y Autopista.