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En corto | Joaquín Cambre

“Claro que haría cine porno. ¿Por qué no?

El director de cine Joaquín Cambre contesta al carrusel de preguntas de este diario

Federico Rivas Molina
El director argentino Joaquín Cambre.
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 Joaquín Cambre (Buenos Aires, 1977) es el director detrás de los videos musicales de Gustavo Cerati, Calle 13, Romeo Santos, Maná, Fito Páez, Chayanne o Tinny Stoessel. Ahora ha saltado al cine con su primer largometraje, Un viaje a la Luna, que presentará la semana próxima en el Festival de Cine de Mar del Plata, el más importante de Argentina.

¿Qué significa ser un director de cine?

No lo sé muy bien porque a los 12 años ya sabía que quería ser director de cine. En mi caso es como un juego.

¿Cómo sería su espectador perfecto?

Sensible y que tenga ganas de cambiar un poco las cosas, que quiera el riesgo

¿Qué película hubiese matado por hacer?

Simplemente sangre de los hermanos Coen es una película que me fascina.

¿Qué película nunca filmarías?

Una que vaya en contra de mis principios.

¿Filmarías cine porno?

Claro, por qué no.

¿Qué film recomendaría a un niño para introducirlo en el cine?

Dos: Mi vecino Totoro, de [Hayao] Miyazaki, y Los Goonies, de Richard Dooner.

¿Qué película le cambió la vida?

Perros de la calle y Pulp Fiction, las dos primeras películas de [Quentin] Tarantino.

¿Con quién le gustaría sentarse en una fiesta?

Con David Bowie. Es alguien que ha vivido mucho y esa es la gente interesante.

¿Cuál es su lugar favorito en el mundo?

Buenos Aires, sin duda.

Respecto a su trabajo ¿de qué está más orgulloso?

De mi última película.

¿Cuándo fue la última vez que lloró?

Seguramente, viendo alguna película de Hollywood. Desde que soy padre estoy más sensible.

¿Cuál es el mejor consejo que le dio alguno de sus padres?

Mi madre me dijo siempre que cuando uno va a dar un salto al vacío debe tener algo de tierra donde afirmarse. Mi padre no era de dar consejos, pero siempre apoyó mucho mi vocación de cineasta

¿Qué lo deja sin dormir?

No haber terminado algún trabajo que estoy a punto de entregar.

¿La última comida que realmente le sorprendió?

En Londres comí huevos revueltos y los hacían como una nube. Fue muy impresionante.

¿En su nevera siempre hay..?

Muchísimos tipos de picantes, mostazas, condimentos, por lo menos cinco de cada uno. No estoy seguro de que deben ir ahí, pero siempre los tengo en la heladera.

¿Tu especialidad en la cocina?

La comida india. Fui a India sólo a comer y al menos una vez por mes hago algo en la cocina.

¿El mejor regalo que ha recibido?

La cámara de vídeo que me regaló mi papá a los 14 años.

¿Qué te reprochan tus amigos?

Que miro mucho el celular, soy como un millennials del móvil

Si pudiera tener un superpoder…

Saltar muy alto, o mirada de rayos x. Sería un superhéroe medio trucho.

¿Olor preferido?

Una mezcla rara de mandarina y metal. Se consigue cuando luego de comer mandarina viajas en colectivo [autobús] y te tomás del pasamanos. Y no estoy demente.

¿En qué país no viviría nunca?

En Alemania, supongo que porque soy judío. No querría traicionar mi historia.

¿Con quién le gustaría quedar encerrado en un ascensor?

Con un actor de stand up.

¿Tiene algún sueño recurrente?

Nunca me acuerdo de lo que sueño.

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Sobre la firma

Federico Rivas Molina
Es corresponsal de EL PAÍS en Argentina desde 2016. Fue editor de la edición América. Es licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de Buenos Aires y máster en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

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