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Columna
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Volcán Herzog

El cineasta traslada sus emociones e inquietudes por la humanidad en el documental 'Dentro del volcán'

Clive Oppenheimer y Werner Herzog en el rodaje de 'Dentro del volcán'.Vídeo: Peter Zeitlinger/Netflix
Álvaro P. Ruiz de Elvira

Cuando te cruzas con alguien a quien le gusta contar historias y que además las cuenta bien, da igual cómo te las cuente. El documental Dentro del volcán (Into The Inferno) bien podría empezar con un "Érase una vez..." y continuar con "...en la mente de un hombre al que le fascina la humanidad y consigue contagiarte de su fascinación", aunque supuestamente de lo que se nos va a hablar es de volcanes. Ese hombre es Werner Herzog, director de cine, guionista, actor, documentalista, contador de historias.

A Herzog le atraen los volcanes desde la primera vez que grabó uno en 1976. Lleva años viajando para verlos y entenderlos. En Dentro del volcán (documental original de Netflix) certifica esa pasión trasladando al espectador su curiosidad. Lo hace en primera persona, narrando sus pensamientos, y a través de conversaciones con Clive Oppenheimer, vulcanólogo de la Universidad de Cambridge. Herzog muestras imágenes hipnóticas de lava, de explosiones, de largas y peligrosas humaredas, pero también se traslada a las faldas de los volcanes para entender cómo la gente vive allí, cómo interpretan las erupciones, cómo se las respeta e incluso cómo se veneran a estos gigantes de la naturaleza. Para ello, lleva su cámara a Indonesia, Islandia, Etiopía e incluso a Corea del Norte.

Puede que el ritmo del documental sea extraño, incluso lento, con esa mezcla de imágenes con música de lava y de entrevistas o personajes curiosos, pero, como ya ocurre con otros documentales del cineasta alemán, como Grizzly Man, no deja de ser fascinante en ningún momento. Herzog es el volcán en sí mismo, con esa voz cavernosa y tajante, expulsando sus inquietudes por el pasado creado por los volcanes y por el futuro que está por venir. "Todo se derretirá, incluso las piedras", le dice como si anunciara el apocalipsis un indígena de Vanuatu a Herzog. El cineasta concluye por su cuenta, "es un fuego que ansía emerger y al que poco le importa lo que hacemos aquí arriba", confirmando su visión de la naturaleza: es caótica y hostil. Como los volcanes que graba.

Fotograma de 'Dentro del volcán'.
Fotograma de 'Dentro del volcán'.

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