Google Family Link: así puedes controlar toda la actividad de los móviles de tus hijos

En alguna ocasión hemos hablado de este tema y los recursos que tienen los padres para controlar la actividad digital de sus hijos, tanto en el uso de los móviles como en el de los tablets. Y como el ecosistema Android es tan variado y tiene tantas instalaciones de diferentes marcas, no existe una herramienta única capaz de centralizarlo todo.

Pero Google ha decidido poner coto a eso y ha lanzado su propia solución, que se sustenta sobre esas familias digitales que podemos organizar alrededor de todas nuestras cuentas de Gmail. Con las aplicaciones Family Link para padres, madres o tutores y Family Link para niños y adolescentes será posible tener control absoluto sobre toda su actividad. IMPORTANTE, estas tareas de supervisión solo es posible llevarlas a cabo sobre dispositivos Android, por lo que si vuestros hijos tienen iPhone, tendréis que recurrir a otras herramientas.

Aplicaciones, tiempo y contenidos

Esa es la Santísima Trinidad sobre la que trabaja esa plataforma de Google Family Link, ya que nos permite controlar cada dispositivo Android (importante, no funciona con iPhone e iPad) para poner coto a las aplicaciones que utilizan nuestros hijos, así como al tiempo que invierten en ellas o el contenido que reproducen. Es cierto que os va a llevar un poco de tiempo esta tarea, pero estamos seguros de que merecerá la pena para promover unos hábitos digitales saludables entre los más jóvenes.

Lo primero que debemos hacer es, si somos los padres, descargar Google Family Link para padres, madres o tutores en nuestro móvil y la otra app en la de vuestros hijos. Tras un proceso de emparejamiento y permisos que debéis conceder, llegaremos al meollo de la cuestión: el control de las aplicaciones que pueden instalar, ejecutar, durante qué horario y, en su defecto, la cantidad de tiempo que la podrán usar.

La plataforma permite recabar muchos datos como el tiempo de uso, accesos al dispositivo, si alguno ha sido fallido, si es necesario cambiar el PIN, amén de otros datos que, a lo largo de los días, nos van a permitir diseñar unos controles más justos. Además, seremos nosotros los que den permiso para hacer descargas, tener localizado el dispositivo en todo momento e, incluso, cerrar el grifo del uso del teléfono bloqueándolo hasta alguna hora del día siguiente. Así evitamos que se queden hasta altas horas de la noche chateando, viendo YouTube o lo que sea.

Como veis, es muy útil tener esa capa de seguridad instalada en los móviles o tablets de vuestros hijos aunque lo mismo a ellos no les hace tanta gracia. En ese caso, toca tener mano izquierda...