El Colegio de Registradores pide cuatro millones a Junqueras
Los profesionales advierten de una caída en la recaudación de la Agencia Tributaria Catalana
La puesta en marcha de las nuevas atribuciones de la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC), como liquidar el impuesto de sucesiones, podría implicar una indemnización de unos cuatro millones de euros para los registradores de la propiedad, que se encargaban hasta ahora de la liquidación de los impuestos cedidos a la Generalitat. El Govern adelantó en dos meses la finalización del convenio que había firmado con los registradores y éstos han recurrido a los tribunales para buscar una compensación, dijo el decano de los Registradores de la Propiedad de Cataluña, Luis Suárez.
“Estoy convencido de que la anticipación en el vencimiento del convenio ha respondido a necesidades no técnicas ni jurídicas, sino más bien de necesidad política de tener una estructura de Estado. Han corrido mucho y se han saltado algún convenio, y por ello creemos que nos deben de indemnizar”, explicó en una entrevista a Efe.
El decano cree que el cambio en la gestión de los impuestos puede suponer una pérdida de recaudación de hasta un 5%. Entre los tributos que ahora asume la ATC están el de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, y el donaciones. La agencia, sostiene Suárez, asumirá “mucho trabajo” de golpe, como la recaudación ejecutiva de multas, y que hará falta tiempo para “asimilar” esa mayor carga de trabajo.
En febrero pasado, tras conocer la intención del Govern de incumplir el convenio, los registradores presentaron una demanda por la vía contencioso-administrativa contra la ATC. Suárez explicó que una decena de oficinas de registradores quedarán en una situación muy precaria por el nuevo sistema de liquidación.