El Gobierno reserva 30 millones para el plan de refugiados de Bruselas

La crisis migratoria que atraviesa Europa ha dejado huella en los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Según el documento presentado por el Ministerio de Hacienda, el Gobierno ha reservado 28,95 millones de euros para el plan de reasentamiento de refugiados impulsado por Bruselas. "Las personas a reubicar son 1.300 [de los llegados a Italia y Grecia] y 1.449 a reasentar en nuestro país [de los que ya viven en otros países de la UE]", insiste el Ejecutivo en su análisis del contenido, después de rechazar la cuota que la Comisión Europea le había asignado: 4.300 y 1.500, respectivamente.

La puesta en marcha de esta iniciativa se enmarca dentro de la reserva de 712,3 millones de euros que compone el Fondo de Asilo y Migración en todos los países comunitarios, impulsada con el fin de "contribuir a lograr una gestión eficaz de los flujos migratorios". Pero, a su vez, coincide a escala nacional con el aumento del 69,8% del programa Acciones a favor de los inmigrantes. Para 2016, el Gobierno ha elevado esta partida hasta los 112,7 millones, frente a los 66,38 millones que contemplaba para el presente año.

"Esta cantidad tiene como finalidad coadyuvar en la integración de los inmigrantes, solicitantes de asilo, refugiados, apátridas y personas acogidas a otros regímenes de protección temporal y subsidiaria", explica la memoria de los Presupuestos Generales del Estado. Esta insiste, también, en que este importe incluye las ayudas "para el desarrollo y promoción de acciones de cooperación con los países emisores de emigrantes".

Dentro de los 112,7 millones de euros reservados para los flujos migratorios, el equipo de Mariano Rajoy destaca unos 15 millones de euros destinados al programa general para la acogida e integración de refugiados y solicitantes de asilo. "Supone un aumento del 150% sobre lo presupuestado en 2015", sentencian los PGE, que detalla que este incremento responde al "ascenso del número de peticiones de protección internacional de personas procedentes en su mayor parte de Siria y de Ucrania". Paralelamente, se eleva un 9,2% la dotación para Atención humanitaria a Inmigrantes llegados a las costas en el Mediterráneo.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, mantiene desde hace meses una tensa relación con los colectivos de refugiados. Sobre todo, después de que rechazara las cuotas propuestas por la UE y comparara los programas de reubicación con una casa "con muchas goteras que inundan distintas habitaciones". Medio centenar de personas se concentró ante la Secretaría de Inmigración para denunciar cómo el Gobierno incumple con las leyes que obligan a España a "dar una acogida digna" y cómo el PP "ha sometido todos los derechos humanos a la política de control de fronteras". "No somos goteras", gritaron los manifestantes, que incidieron en que 300 solicitantes de asilo se han quedado sin plaza en España por falta de recursos. Una idea sobre la que Acnur hizo hincapié: "Los recursos destinados a la atención de este colectivo no se han incrementado de forma proporcional al aumento de las solicitudes en los últimos años, creando situaciones de indigencia".