Vida&Artes
Hasta ahora, todos podíamos ser Howard Carter. Ese privilegio se va a acabar. "Íbamos a ser testigos de un espectáculo que ningún otro hombre de nuestra época había tenido el privilegio de ver", escribió Carter de su impresión al entrar en la tumba de Tutankamón.
"No como huevos ¿No se acuerda nadie de Yúshenko?". Anna, estudiante de Derecho en la Universidad Humboldt (Berlín), se refería a las tremendas deformaciones que un envenenamiento por dioxinas provocó en 2004 al ex presidente ucranio Víktor Yúshenko.
El pequeño Nicholas Volker, que ahora tiene seis años, estuvo a punto de fallecer en numerosas ocasiones. Sufría no una, sino dos extrañas enfermedades casi imposibles de identificar a través de sus síntomas. Cuando comía, se producían en sus intestinos unos agujeros enormes, por los que las heces se colaban a una herida en su abdomen.
¿Qué fue peor: condenar a dos hermanas a cadena perpetua por tomar parte en un robo por el que se embolsaron entre 11 y 200 dólares (entre ocho y 154 euros) o que el Gobernador de Misisipi las haya liberado a cambio de que una de ellas le done un riñón a la otra? La polémica está servida.
La televisión estatal da otro rejonazo a la tauromaquia. En principio, RTVE justificaba la renuncia a retransmitir este tipo de festejos en su discreta audiencia. Posteriormente, alegó problemas presupuestarios, incompatibles con el alto coste de los derechos.