La moda urbana ha vuelto a Barcelona con The Brandery, versión catalana de la alemana Bread & Butter. En su segunda edición y hasta mañana, la pasarela -animada en marcas y expositores- ha tomado Montjuïc, intentando contestar a la pregunta de qué se llevará el invierno que viene. Las respuestas son diversas.
Tiembla y se aferra al brazo de uno de sus hijos al cruzarse con algún compatriota en Cunit (Baix Penedès). Fátima Ghailan, musulmana de 31 años nacida en Marruecos, habla un catalán impecable, pero no quiere explicar qué la inquieta. "Mi posición es difícil, no tengo ni protección policial", se excusa. Profesa el islam a la vez que trabaja, conduce con asiduidad y no lleva velo.
El catalán será el idioma de uso general y predominante en el Ayuntamiento de Barcelona; tanto en las comunicaciones internas como en las notificaciones al ciudadano y en la relación con empresas concesionarias de servicios o entidades receptoras de subvenciones municipales.
Finalmente, Convergència i Unió (CiU) impulsará la creación de una comisión de investigación sobre el incendio de Horta de Sant Joan (Terra Alta) en el que el pasado mes de julio murieron cinco bomberos. Lo anunció el portavoz de la federación nacionalista, Oriol Pujol, durante la sesión de control al Gobierno en el Parlament.
El nuevo decreto ley de comercio puso ayer el punto final a una novela que duraba ya ocho años. Lo hizo de manera discreta, casi imperceptible. En una disposición adicional, la novena, la normativa dirigida a la ordenación de equipamientos comerciales legalizó la existencia de la gran superficie de la compañía Boulanger en Sant Boi de Llobregat
"Lo positivo es que, pese a todo, nosotros nos quedamos a vivir en Barcelona". Esta frase final en la conversación entre Toni Sagarra y Leopoldo Rodés, dos figuras de sector de la publicidad en Cataluña, parece resumir el aroma que respira el monográfico dedicado a Barcelona de la prestigiosa revista Matador.