La sentencia del Tribunal de Primera Instancia de la UE que ratificó en septiembre pasado la ilegalidad de las llamadas vacaciones fiscales del País Vasco está aún lejos de llegar a su estación término.
Petru Cires lleva seis años viviendo en España, hasta hace poco tenía una cuadrilla de seis albañiles a su cargo y ayer cumplió seis días en huelga de hambre. Apostado junto a la entrada del Colegio Americano de Bilbao, en Berango, permanece a base de agua para protestar porque, según asegura, aún no ha cobrado un duro.
Las administraciones públicas no quieren que se repita el caso Rover. Las juntas arbitrales del Concierto Económico vasco, del Convenio navarro y la Central de Régimen Común, es decir, los órganos que dilucidan extrajudicialmente los conflictos entre las haciendas, tampoco.
El presidente del PNV de Guipúzcoa, Joseba Egibar, afirmó ayer que su partido no está participando en las iniciativas de unidad de acción que se están propugnando entre las fuerzas nacionalistas porque tiene su "vía propia". Con estas palabras, descartó la involucración del PNV en un proceso de diálogo con otras formaciones y sindicatos abertzales.
Decenas de miles de personas han acudido a lo largo del fin de semana a los cementerios vascos. Cada visita es un relato personal de duelo y recuerdo, y cada relato suma un renglón a los anales de estas crónicas de la historia que son los camposantos.
No hay tribunal humano que pueda reparar la perdida de una hija, reconoce Asun Casasola, madre de Nagore Laffage, la joven irundarra que murió asesinada en los Sanfermines del pasado año. Aun así, todas sus esperanzas están puestas en el juicio que arranca hoy en Pamplona.
TXEMA G. CRESPO | Bilbao
Concha Velasco, que presentó ayer en Santurtzi 'La vida por delante', de Román Gary, confiesa su pasión por Bilbao y su alcalde