La amenaza atómica
El 9 de octubre de 2006, Corea del Norte sorprendió al mundo con la primera prueba nuclear de su historia. Ayer volvió a desafiar a la comunidad internacional con una explosión atómica subterránea de una potencia muy superior, según anunció el propio Gobierno norcoreano y confirmó Rusia. Poco después, disparó tres misiles de corto alcance.
Desde que el pasado agosto el líder norcoreano Kim Jong-il sufrió una apoplejía, una pregunta ha surgido cada vez con más fuerza entre quienes siguen los arcanos de la política del país más aislado del mundo: ¿quién sucederá al querido líder?
Barack Obama no quiso restar importancia al día que ayer se celebraba en Estados Unidos -el Memorial Day, la conmemoración de los caídos en guerra- y compareció ante la prensa antes de dirigirse al cementerio de Arlington para declarar que las acciones de Corea del Norte suponen "una grave amenaza a la paz y seguridad mundial".
El Gobierno y el Congreso de Estados Unidos se han movilizado para impedir que el secretario general de la Organización de Estados Americanos, José Miguel Insulza, pueda cumplir, con el apoyo de un grupo de países encabezados por Venezuela, su propósito de reintegrar a Cuba a esa organización en la próxima asamblea.
Bolivia celebró ayer dividida el bicentenario del primer grito de independencia del continente americano, proclamado el 25 de mayo de 1809 en Chuquisaca. En ese departamento, el Gobierno y las autoridades regionales opositoras organizaron actos paralelos.
Hasta 500 altos cargos de la Royal Air Force (RAF), la Fuerza Aérea del Reino Unido, están a expensas de ser sometidos a chantaje después de que desaparecieran en septiembre tres discos duros con delicados detalles sobre su vida privada, desde si frecuentan prostitutas a si son infieles a sus parejas; si tienen problemas de drogadicción o problemas médicos.
Los combates que tienen lugar en Mogadiscio son de los peores en muchos meses: 208 muertos, 700 heridos y 57.000 desplazados desde el viernes. La guerra que allí se libra ante la pasividad de las fuerzas africanas de interposición entre moderados y extremistas es una por delegación entre Occidente y grupos satélites del universo ideológico de Al Qaeda.