Los partidos enlatan sus mítines
Es el gran escaparate de los partidos para lanzar sus mensajes; el mejor vehículo para llegar a millones de personas (léase potenciales votantes). A la vista del enorme poder de la televisión, los partidos se afanan en tener en su mano el control de las imágenes. Hasta el punto de no permitir que las cámaras de las cadenas graben a sus líderes mientras arengan a sus fieles.