Secundarios de lujo
Su destino estaba claro; los artesanos que los crearon, ellos mismos, todos lo conocían. El marco se sabe parte de un elenco y es muy consciente de su papel de secundario. Aunque ha tenido sus momentos estelares: en el año 1587 se pagó más por la confección del marco de El expolio de El Greco que por la propia pintura. Costó 200.600 maravedíes, y la pintura, 119.000.