El inversor con inquietudes religiosas, éticas o medioambientales dispone cada vez de más fórmulas para gestionar su dinero sin remordimientos. Los fondos que se rigen por determinados valores para operar en Bolsa proliferan en el mercado estadounidense, y ya existen productos católicos, musulmanes, verdes o socialmente responsables.
MIGUEL ÁNGEL NOCEDA | Madrid
Los accionistas de Endesa esperan que el precio definitivo de la oferta supere los 40 euros por título
La primacía de Nueva York como capital financiera del mundo está en peligro. La complejidad de la normativa estadounidense, la estricta regulación de las compañías cotizadas, la facilidad para interponer demandas arbitrarias y las restricciones a la entrada en el país de trabajadores extranjeros restan cada vez más atractivo a Wall Street.
La reforma de la ley de protección a los consumidores fue recibida como una victoria por las asociaciones de usuarios.