Sin derecho a volver a casa
CARLOS E. CUÉ | Madrid
"Estar en tierra de nadie es lo peor que te puede pasar", dice con desesperación Mohammed Kamara, un hombre de 44 años de Sierra Leona. Allí sigue, con otros cuatro compañeros, por un golpe de mala suerte. No es inmigrante ni quiere serlo, de momento. Es un marinero experimentado al que se le ha estropeado el barco y, confundido con un inmigrante más, ha sido expulsado de Marruecos a una zona minada.