Paz y precariedad centran el Primero de Mayo
Las calles de las principales ciudades españolas se poblaron ayer, en la jornada del Primero de Mayo, de trabajadores que reivindicaron la paz, el empleo estable y la igualdad. La jornada, con más presencia que nunca de inmigrantes que clamaban por un empleo de calidad, se centró en rechazar la precariedad del mercado laboral, que afecta prácticamente a uno de cada tres asalariados en España.