'Tenemos que defendernos de la feroz competencia norteamericana'
JESÚS RUIZ MANTILLA | Madrid
Alejandro Amenábar volaba anteanoche por el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid como una cometa. Alto muy alto y de un sitio para otro. Le llevaban de corro en corro y de micrófono en micrófono. Pero no se quejaba. No protestaba. Estaba en su nueva nube.