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Pablo Sánchez: “Está absolutamente probado que Toledo cometió delito”

El fiscal de la Nación de Perú asegura que la constructora brasileña colaboró al comienzo con la investigación, pero "ahora es un periodo de 'stand-by"

El fiscal de la Nación de Perú, Pablo Sánchez durante la entrevista.
El fiscal de la Nación de Perú, Pablo Sánchez durante la entrevista.Adrián Portugal

Como fiscal de la Nación de Perú, a Pablo Sánchez Velarde le ha tocado lidiar con uno de los mayores casos de corrupción de la historia del país y América Latina. Desde noviembre pasado, un equipo especial de fiscales investiga los negociados de Odebrecht, que, junto con otras empresas brasileñas de la construcción, movió millonarios sobornos para ganar las licitaciones de las principales obras públicas del país. Sánchez habló con EL PAÍS sobre los avances de su despacho en esta compleja trama judicial. 

Pregunta. Perú es uno de los países con mayores logros en sus investigaciones a Odebrecht. El expresidente Alejandro Toledo está por ser extraditado y un exviceministro fue detenido, junto con varios funcionarios públicos. Pero diera la impresión de que ahora el proceso se ha frenado.

Respuesta. Es una impresión equivocada. Quizá la comparten muchas personas, que quisieran que los procesos comience, avancen y acaben de golpe. Pero es imposible que una investigación que se conoció en noviembre termine en marzo. En Brasil se demoró varios años, y aún sigue. No olvidemos además que no se trata de una, sino de varias investigaciones.

P. En su delación a la justicia norteamericana, Marcelo Odebrecht habló de 29 millones de dólares en sobornos…

R. Ese es un dato inicial, obviamente muy pequeño. Debe ser mucho mayor, en atención a los montos de las licitaciones públicas de tantos años. Solo una obra que motivó un proceso en Áncash [región al norte de Lima] cuesta 400 millones de dólares. Nosotros calculamos entre el 10% y el 15% en sobornos por cada obra, así que saque su cuenta.

P. ¿Odebrecht está colaborando con la investigación?

R. La empresa sabe que está en falta, y al comienzo estuvo colaborando con la investigación, pero ahora estamos en un periodo de stand-by. Cuando se inició la investigación, la empresa abrió sus puertas y dijo que aceptaba los cargos, que iba a dar la información, pero quería un trato distinto sobre la continuidad de su trabajo, esperaban que no les cerraran las empresas. En Brasil es diferente, ahí llegó a un acuerdo y sigue postulando a obras y trabajando, lo que le ha permitido a la justicia obtener información de los delatores.

Perú es uno de los países con mayores logros en sus investigaciones a Odebrecht

P. ¿Me está diciendo que Odebrecht no colabora como antes porque ya no puede hacer negocios en Perú?

R. Hay un problema de esa naturaleza. Que no sucede en Brasil, porque la empresa sigue trabajando. Parece que será posible conseguir más información, pero no de momento.

P. ¿Ustedes han entregado información a otros países?

R. Hemos dado alguna información, por ejemplo a Panamá. Sucede que Brasil tiene el expediente principal, con muchas delaciones que involucran a funcionarios del Perú y otros países. Hace unas semanas, cuando los once fiscales latinoamericanos nos reunimos en Brasilia, nos dimos cuenta de que todos íbamos avanzando, aunque a distinta velocidad. Después de Brasil, Perú es uno de los países que más ha indagado, en poco tiempo. Nos comunicamos mucho por Whatsapp con los fiscales. Es una buena forma de trabajar.

P. ¿Vivimos un momento similar al año 2000, cuando el gobierno de Alberto Fujimori cayó por graves hechos de corrupción?

R. Durante cinco años, yo estuve encargado de coordinar los casos de Vladimiro Montesinos [exasesor de Fujimori]. Por lo que pude trabajar entonces, yo creo que la corrupción de Odebrecht es mayor. Involucra distintas modalidades de soborno, empleadas por varios gobiernos, en varios países hermanos. Montesinos solo era el asesor de un presidente. Odebrecht trabajó con presidentes, con ministros, al menos en tres gobiernos.

P. Usted se ha enfrentado al Congreso de la República para garantizar la independencia del fiscal Hamilton Castro [jefe del grupo especial de fiscales para el caso Lava Jato]. ¿Cómo ha vivido esa experiencia?

R: Lo que hemos hecho nosotros es defender la independencia del fiscal y la autonomía del Ministerio Público. No nos negamos a ir al Congreso, sino a hacerlo para que nos pregunten por temas que están sometidos a investigación y son reservados. Si no podemos hablar de ellos, ¿para qué vamos a asistir? ¿Para recibir un maltrato? Eso no lo vamos a permitir.

Presidentes, vicepresidentes, ministros o viceministros: el que cometió delito es investigado

P: ¿Por qué tarda tanto la extradición de Alejandro Toledo?

R: Por tecnicismos de orden procedimental. Ya se informó, se cumplió con pedir la detención preventiva con fines de extradición, pero el Departamento de Justicia de los Estados Unidos exige solvencia probatoria, antes de acceder a la detención. Los fiscales y los jueces de Perú están trabajando para absolver estas necesidades. Desde mi punto de vista, está absolutamente probado que en el caso de Toledo se cometió delito.

P: ¿Veremos muchas más capturas?

R: A partir del primero junio, el procurador general de Brasil, Rodrigo Janot, podrá revelar el contenido de todas las delaciones premiadas, que en algunos casos están vinculadas con el Perú. Además, estamos esperando información de Suiza. El Departamento de Operaciones Estructuradas de Odebrecht empleaba el programa My Web Bay, para codificar toda la información de sus pagos. Estos códigos vienen siendo descifrados, y en cualquier momento recibiremos una respuesta. Yo pronostico que habrá más investigaciones y más personas involucradas.

P: Ahora mismo están involucrados los expresidentes Alan García y Ollanta Humala, junto con otros importantes líderes políticos y empresariales. ¿La Fiscalía seguirá adelante con sus investigaciones, caiga quien caiga?

R: Caiga quien caiga. Ciertamente, acá nosotros no tenemos ninguna contemplación con quienes hayan cometido delito. Presidentes, vicepresidentes, ministros o viceministros: el que cometió delito es investigado. Lo que tiene que entenderse es que no se investiga en orden cronológico, sino en atención a las pruebas que nos van llegando.

P: ¿Incluso si se alcanza al actual presidente, Pedro Pablo Kuczynski, involucrado como testigo en el caso de la Carretera Interoceánica?

R: Mi afirmación es global. Nosotros no excluimos a nadie, pero somos objetivos. Si hay pruebas para investigar a las personas, lo vamos a hacer. Pero hay que contar con ellas, no basta con simples sospechas o presunciones.

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