Bush: "El tiempo ha pasado, pero los recuerdos no desaparecen"

Los atentados del 11 de septiembre de 2001 se han convertido en el eje de la campaña de George W. Bush, como lo han sido de su presidencia, en su intento por mantenerse en la Casa Blanca tras los comicios de noviembre. Así, el homenaje a las víctimas en el tercer aniversario del ataque ha estado tiznado por la pugna electoral. "El tiempo ha pasado, pero los recuerdos no desaparecen", ha explicado compungido el presidente, resumiendo así el sentir de su país.

Estados Unidos ha vivido una jornada de luto y homenajes, que han tenido su punto álgido a las 8.46 de la tarde (en Nueva York; seis horas más en España), el momento exacto en el que, hace tres años, impactaba el primer avión contra las Torres Gemelas. Ese instante hizo temblar el mundo, y las reverberaciones aún lo estremecen, sobre todo en algunas zonas muy concretas.

A algunas de ellas se ha querido referir Bush durante su tradicional discurso por radio de los sábados, que en esta ocasión —por segunda vez en su mandato; la anterior fue para anunciar medidas económicas de gran calado— ha pronunciado en directo. Según ha dicho, Estados Unidos "Está decidido a seguir la ofensiva contra los terroristas", pues tres años después "la guerra contra el terrorismo continúa". "Nuestra determinación se sigue sometiendo a prueba. Pero seguimos decididos y seremos pacientes hasta conseguir el éxito de una causa justa", ha añadido.

"El tiempo ha pasado, pero los recuerdos no desaparecen... Recordamos la crueldad de los enemigos que asesinaron a los inocentes y se alegraron con nuestro sufrimiento. Recordamos tantas vidas buenas que terminaron demasiado pronto, y que nadie tenía el derecho de acabar", ha dicho el presidente, que minutos antes había rendido en silencio homenaje a las víctimas junto a su esposa y a su vicepresidente, Dick Cheney, en el jardín de la Casa Blanca.

Gracias a su gestión, Estados Unidos "es hoy más seguro que hace tres años, pero no está aún totalmente seguro", por lo que será necesario que él siga al frente los próximos cuatro años. A cambio de la confianza de los electores, ha terminado este razonamiento prometiendo que "seguirá en la ofensiva y perseguirá a los terroristas allá donde se entrenen, o duerman o intenten echar raíces". Ha señalado además que está decidido a "avanzar la democracia en el gran Oriente Próximo". Esa libertad "traerá consigo la paz y la seguridad que todos deseamos", ha dicho, pues "cuando los pueblos de esa región reciban nueva esperanza y vidas dignas, abandonarán antiguos odios y resentimientos y los terroristas hallarán menos neófitos".

Mientras, las iglesias hacían repicar sus campanas en memoria de las casi 3.000 víctimas del ataque. En la zona en la que antes se erguían las Torres Gemelas, padres y abuelos leían los nombres de las víctimas ante una multitud emocionada. "Os queremos más hoy que ayer, y os querremos más mañana que hoy", dijo una madre emocionada, mientras una orquesta ponía la melodía de fondo.

En cualquier caso, las ceremonias de recuerdo han sido menos multitudinarias que las de años anteriores, y han menudeado las referencias políticas. Además de Bush, ha hablado su contendiente, el senador demócrata Johh Kerry, que desde Boston a pedido a sus conciudadanos que se unan en la lucha contra el terrorismo. "El 11-S fue el peor día que hayamos vivido, pero sacó lo mejor de todos nosotros. Debemos recordar siempre que sólo derrotaremos a los que quisieron destruirnos manteniéndonos unidos como una sola América", ha señalado Kerry.