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ULSTER

Un grupo protestante reivindica el asesinato de un católico en Belfast

La víctima, un empleado de Correos de 20 años, ha recibido varios disparos poco después de llegar a su lugar de trabajo

Un grupo armado protestante, los Defensores de la Mano Roja, ha reivindicado esta mañana el asesinato pocas horas antes de un empleado católico de los servicios de correos en un barrio protestante del norte de Belfast. La víctima, Daniel McColgan, de 20 años, ha recibido varios disparos poco después de llegar a su lugar de trabajo, una oficina postal del barrio de Rathcoole, hacia las 5.45 de la mañana, hora española.

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Según recuerda la emisora BBC, el nombre de Defensores de la Mano Roja ha sido utilizado como tapadera en varias ocasiones en el pasado tanto por la UDA como por la Fuerza Lealista de Voluntarios (LVF), dos grupos armados lealistas que se oponen al proceso de Paz.

Daniel McColgan, con cuya pareja tenía un niño de menos de un año de edad, se disponía a salir de su coche, que había aparcado junto a la oficina postal, cuando dos hombres encapuchados se le jan acercado y le han disparado en repetidas ocasiones. La víctima ha sido trasladada al Mater Hospital, donde murió poco después de ser ingresado.

Los autores del asesinato pueden haber utilizado un Renault 14 para huir de lugar de los hechos, ya que un coche de este tipo fue encontrado abandonado cerca del lugar de los hechos.

El ministro para Irlanda del Norte, John Reid, ha condenado este asesinato, subrayando que la gente "debe hacer frente a la lucha entre la paz y el odio". "No podemos permitir que los violentos llenos de odio lleven de nuevo a Irlanda del Norte hacia la oscuridad", ha apuntado Reid.

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El servicio de correos norirlandés ha emitido un comunicado en el que se muestra "muy afectado y entristecido" por el asesinato de uno de sus trabajadores, asegurando que hará todo lo posible por apoyar a la familia de la víctima y a sus compañeros.

Un cámara recoge imágenes del coche calcinado usado por los terroristas para asesinar al empleado de Correos.
Un cámara recoge imágenes del coche calcinado usado por los terroristas para asesinar al empleado de Correos.AP

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