Beneficios
La distribución de los beneficios empresariales es un debate recurrente en el capitalismo. En época de mucha demanda de empleo, como la actual, las empresas pueden ofertar salarios bajos, por lo que los beneficios pueden ser elevados. Pero unos salarios bajos provocan desánimo en los trabajadores y, socialmente, mucha desigualdad. Es el Gobierno, con su política, el que tiene que influir para evitar estos desajustes. Para la economía productiva son más importantes los ingresos de los trabajadores que los de sus directivos. El de aquellos repercute en la economía real y cercana (alimentación, bienes de consumo), y el de estos, en fondos de inversión o paraísos fiscales. Por ello, la subida del salario mínimo muy por encima de la inflación es algo que beneficia a todos.— Joaquín Gismero Bris. Torrejón de Ardóz (Madrid).