Más memoria
El pasado 24 de abril Francia homenajeó a los deportados en los campos de concentración nazis. Este homenaje se celebró en muchas ciudades. En París, el acto presidido por el primer ministro, Manuel Valls, y la alcaldesa, Anne Hidalgo, homenajeó a los prisioneros españoles de dichos campos. Conviene recordar que hubo unos 9.500 prisioneros, de los cuales murieron unos 5.500. También conviene recordar que Franco no los consideraba españoles (llevaban un triángulo azul de apátridas) y que lógicamente buscaba su exterminio por parte de sus aliados nazis.
No aspiramos a homenaje como el que se ha hecho en Francia o en Alemania; lo grave es que parece que, para los sucesivos Gobiernos democráticos, estas personas siguen sin ser españolas porque se les sigue ignorando. Como a las miles de personas asesinadas y represaliadas por el franquismo.— Juan Gabriel Blanco Sanz.