Resaca real
Pedimos, por favor, menos carbón: libradnos de pavos —y no navideños— y sus pavadas
Queridos Reyes Magos: gracias por marcharos. Antes de nada, perdón: gracias por venir. Vuestra partida marca el final de este lío y el retorno de la anodina, ansiada normalidad. Se acabó el turrón (hola, michelines), se acabaron los mensajes de caritas besadoras y cansinos deseos, se acabó explicar que tus Navidades han sido como ¡Qué bello es vivir! aunque seas la reencarnación del Grinch. Al menos este año ha bajado el ritmo las chorraditas vía WhatsApp. Es algo.
Ya que este fin de semana siempre hay algún regalito perdido de Sus Majestades por recoger, a ver si esta Resaca Real (¿con mayúscula?) deja algo decente y nos ayuda con los propósitos. Pedimos, por favor, menos carbón: libradnos de pavos —y no navideños— y sus pavadas. Menos mala educación, más respeto por los que nos quieren, en definitiva, menos Justin Bieber. Ya es llegar tarde: nada más empezar el año salta con novia. Ni con agua caliente… Lo pediremos para 2017.
Majestades, manden unos royals bien puestos, rondando la adolescencia, esos semidesconocidos que nos den que hablar. Nacionales o extranjeros. Que el príncipe Enrique se está haciendo mayor y Froilán está perdido en combate. Tráiganse unas celebs guerreras, con alegatos no feministas, sino de pura decencia y sentido común, que enseñen el corazón y el dedo ídem en la alfombra roja al ser cuestionadas por su manicura. Más Cate Blanchett, Jennifer Lawrence, Inma Cuesta, Carrie Fisher, tías de pro.
Queridos: a ver si el año que viene, en vez de magos, sois magas. Y sobre todo, a ver si nadie se queja por chorrada tal, reinas.