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CLAVES
Columna
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El estado de la Unión

¿Se lanzaría usted al combate al lado de alguien que enarbolando la bandera europea gritara "förenade i mångfalden"?

Hoy se celebra en el Parlamento Europeo el debate sobre el estado de la Unión. La solemnidad en la que las instituciones envuelven sus actos públicos más destacados nos puede parecer a veces vacía pero cumple una función: crear y recrear sentimientos de pertenencia. La política necesita pasiones e intereses, pero también rituales. Sin ellos, una comunidad es una mera amalgama de individuos vinculados de forma oportunista en función de circunstancias cambiantes.

Eso explica que las instituciones europeas, generalmente huérfanas del entusiasmo popular, se doten de la parafernalia típica de los Estados: la bandera (azul), el himno (de la alegría), el día oficial (el 9 de mayo), la moneda (el euro) y el lema común (unida en la diversidad). Ese lema refleja bien la inmensidad del desafío que enfrentan los habitantes de este territorio de más de 500 millones de habitantes. Porque si se toman la molestia de leer ese lema en las 24 lenguas oficiales de la UE, comprobarán que por lo menos en 18 de ellas ni siquiera son capaces de imaginar que ese sea el mismo lema que el suyo. Hagan el ejercicio: tropezarán con el moninaisuudessaan yhtenäinen finés y se atragantarán con el zjednoczeni wró norodnoci polaco. Y así sucesivamente con el egyesülve a sokféleségben húngaro o el aontaithe san éagsúlacht irlandés. ¿Se lanzaría usted al combate al lado de alguien que enarbolando la bandera europea gritara förenade i mångfalden?

La Unión Europea es un artefacto complicado: no es un Estado, tampoco una nación y sólo en parte una democracia, algo siempre en construcción y por necesidad imperfecto e insatisfactorio. Por eso, a la vez que de este debate esperamos una evaluación franca sobre las (numerosísimas) dificultades que enfrentamos, desde la crisis de asilo y refugio a la tarea inacabada de construir una unión monetaria al servicio del crecimiento y el empleo, sin olvidar el desafío de actuar unidos y eficazmente ante las amenazas a nuestra libertad y seguridad que se generan en nuestro entorno geográfico más cercano, también esperamos una inspiración para seguir adelante, una visión sobre el futuro y un liderazgo efectivo. La Unión, una vez más, necesita más unión. @jitorreblanca

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