_
_
_
_
_

El impuesto sobre mansiones asusta a los millonarios londinenses

Angelina Jolie asegura que desistirá de comprarse una casa en Londres si se impone la tasa

Angelina Jolie, el martes por la noche en el estreno de 'Unbroken', en Londres.
Angelina Jolie, el martes por la noche en el estreno de 'Unbroken', en Londres. Samir Hussein (WireImage)

Los ricos con residencia o propiedades en Gran Bretaña tiemblan ante la posibilidad de que se imponga el llamado impuesto sobre mansiones. De momento es sólo una de las propuestas del programa electoral de los laboristas y que los conservadores, actualmente en el gobierno, no contemplan. Pero si en las próximas elecciones generales de mayo de 2015 ganara tanto el partido de Ed Miliband como los liberal demócratas de Nick Clegg (esto último es poco probable, aunque hoy son parte de la coalición gubernamental), ambos impondrían un impuesto sobre aquellas casas cuyo valor sea de más de dos millones de libras (2.5 millones de euros). “Soy muy responsable con el dinero y sin duda esa tasa podría quitarme las ganas de comprar una casa en Londres”. Esta fue la respuesta de Angelina Jolie  al ser inquirida por los medios británicos sobre el impuesto sobre mansiones a la vista de sus intenciones de instalarse en una ciudad en la que “he vivido anteriormente y en la que sin duda me gustaría tener un pie por cuestiones de trabajo”. La actriz, directora y activista acudió a Londres para el estreno de la película Unbroken, su último trabajo como directora, con el que ha disfrutado tanto que se plantea seriamente abandonar la interpretación para concentrarse únicamente en la dirección, según declaró recientemente en medios australianos.

Entre quienes ya se han pronunciado en contra de este impuesto están el humorista Gryff Rhys Jones y la cantante y presentadora Myleene Klass, una de las celebridades más ricas de Gran Bretaña. Según cálculos del Financial Times, el impuesto significaría que quienes poseen una mansión de entre 2 y 3 millones de libras pagarían unas 3.000 libras al año (3.800 euros) mientras que quienes poseen propiedades más caras podrían llegar a pagar hasta 19.000 libras al año (24.000 euros) puesto que sería un impuesto progresivo. Los pensionistas podrían posponer el pago hasta su muerte y quienes tienen bajos ingresos pero una casa cuyo valor se ha multiplicado estarían exentos del pago. Teniendo en cuenta que Angelina Jolie y su marido Brad Pitt acumulan juntos una fortuna de 328 millones de euros, pagar ese impuesto difícilmente provocaría un terremoto en su bolsillo.

Según los laboristas el impuesto apenas afectaría al 0.5% de la población británica puesto que el precio medio de una casa en Gran Bretaña es de 241.000 libras y en Londres de casi el doble. Las propiedades de más de dos millones de libras son entre 50.000 y 90.000, según qué empresa inmobiliaria haga el cálculo.

Actualmente todos los británicos abonan el impuesto sobre bienes inmuebles (Ibi, en inglés council tax), que varía según el barrio y los ocupantes de una propiedad. Pero el impuesto sobre mansiones no sería un impuesto municipal sino nacional y con su recaudación los laboristas aspiran a recaudar unos 1.200 millones de libras (1.500 millones de euros) que destinarían a financiar el sistema nacional de salud (NHS), afectado por una grave crisis.

La mayor concentración de casas por valor de más de dos millones de libras está en los barrios londinenses de Chelsea y Kensington, donde viven, entre otros, la familia Beckham, el multimillonario Roman Abramovich y el actor Hugh Grant.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_