Generación perdida

Soy un trabajador de 52 años, actualmente en paro como muchos de mi generación, cobrando la ayuda social desde hace cinco meses, y sin expectativas de encontrar trabajo por las circunstancias actuales del mercado de trabajo. Cada día más cansado y aburrido de enviar currículos sin respuesta (no en mi calificación profesional, sino en cualquier puesto de trabajo, pues solo quiero es trabajar).

Hace unos días escuché al señor Méndez hablar de la generación perdida, que somos los trabajadores de 50 años en adelante en paro y de los que nadie se acuerda. Podemos decir que somos la generación más olvidada. Después de llevar cotizados 35 años, sólo tenemos derecho a dos años de paro y 18 meses de ayuda social. No podemos conseguir un puesto de trabajo por tener más de 50 años, nos consideran viejos para contratarnos. De nada sirven la experiencia y la vida laboral. Nos llaman viejos, pero tampoco nos podemos jubilar. Yo no pido que nos jubilen, pero sí que nos apoyen y nos ayuden como hacen con los jóvenes, por ejemplo; cosa que me parece bien. Pido que no se olviden de esta generación de los sesenta que se siente olvidada y marginada. Por favor pido que dejemos de ser la generación perdida.— Sebastián Gómez León.