Eurovegas y la ley antitabaco
Los fumadores no lo tienen fácil, nosotros tampoco. En este país, cientos y miles de profesionales estamos intentando ayudar a las personas a dejar de fumar; además, estamos trabajando en el campo de la prevención para que los adolescentes no se inicien en el consumo de tabaco, pero la realidad es que los cigarrillos son cada vez más adictivos, lo que conlleva que a los fumadores les cueste cada vez más dejarlo, convirtiéndose en unos héroes que luchan contra esta adicción.
Pero además tenemos un problema todavía mayor: la presión de la industria tabacalera y sus aliados está aflorando de nuevo en la política, amenazando la aplicación y continuidad de medidas eficaces para prevenir los efectos del consumo de tabaco en la población.
Estos políticos quieren modificar la ley, se creen héroes y salvadores que llevan a cabo tareas imposibles enfrentándose a una sociedad cada vez más democrática y tolerante, según se convencen a sí mismos; pero solo ven lo que quieren ver, olvidan lo real y recuerdan lo que es falso.
La tentativa de modificar la ley anunciada por Ignacio González, presidente de la Comunidad de Madrid, es un ejemplo de esta actitud.
Los políticos tendrán que optar por defender los intereses de la industria tabaquera y aliados u optar por la salud de sus ciudadanos.
Señores políticos y responsables: ¿no les parece suficiente este número de muertes? ¿No habría que tomarse más en serio el problema del tabaquismo de nuestros ciudadanos?— Plácido Gascó. Coordinador nacional de tabaquismo de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), Pamplona.
