_
_
_
_
_

Silvio Berlusconi: la fiesta continúa

Mientras un tribunal de Milán investiga a ‘Il Cavaliere’, una modelo cuenta con pelos y señales las juergas que todavía se celebran en la Villa Arcore

Silvio Berlusconi.
Silvio Berlusconi.GTRES

Muerto el perro, no se acabó la rabia. ¿Quién podía esperar que Silvio Berlusconi, una vez apeado del poder, dejara de organizar fiestas subidas de tono en alguna de sus múltiples mansiones? Al tiempo que un tribunal de Milán sigue intentando averiguar si el anterior primer ministro italiano cometió un delito de inducción a la prostitución de menores, las jóvenes invitadas a sus fiestas siguen contando detalles a cual más escabroso. Una de ellas, Marysthelle Polanco, ha confirmado que en la villa de Arcore se siguen celebrando fiestas como aquellas en las que ella misma se disfrazaba de Obama, otras de monjas —con su crucifijo y todo— e incluso alguna se caracterizaba como el político italiano de moda en ese momento…

Para subrayar sus palabras, la joven modelo se dejó fotografiar por la revista Oggi disfrazada de Obama. “Lo hacíamos”, aclara, “para divertir a Papi”. Pero Papi, o sea, el señor primer ministro, tenía una capacidad de diversión bastante peculiar. Así que, cuenta Marysthelle Polanco, las muy bien remuneradas muchachas echaban el resto noche tras noche: “He visto a la Minetti y a Barbara Faggioli vestidas de monjas, con crucifijo y toca. Iris Berardi hacía de Ronaldinho, Linsay Barizonte, en cambio, de [los políticos italianos] D'Alema o Di Pietro, en base a las noticias del día. Estábamos bien informadas…”.

A Silvio Berlusconi parece no importarle. Ni a él ni a casi nadie. ¿Quién se puede sorprender ya de lo que el anterior primer ministro hiciera en alguna de sus múltiples mansiones? Hiciera… o hace. Según el testimonio de la modelo, en la villa de Arcore continúan las cenas. “Pero él”, continúa, “me ha dicho que quiere volver a hacer también las fiestas de después [lo que se vino a llamar el bunga bunga]. Las invitadas somos siempre las mismas. Berlusconi no sabe que entre nosotras ya no nos hablamos, porque no le gusta que discutamos, así que fingimos ser amigas, pero algo se ha roto entre nosotras”. Tal vez alguna culpa la tenga el caudal menguante de dinero o tal vez la celebración del juicio en Milán. Las muchachas se ven obligadas a decir lo que hacían las otras, entran en contradicción, fallan en la estrategia dispuesta por el abogado común y terminan colisionando…

Ambra Battilana, ex Miss Piamonte, contó al tribunal que, la noche del 22 de agosto de 2010, las gemelas Eleonora y Concetta De Vivo se quedaron prácticamente desnudas durante una de las fiestas en Arcore: “Solo llevaban puesto un vestido corto, con los senos y los genitales sin ninguna tela encima”. Battilana ya había contado en otro de los procesos contra el anterior primer ministro que Nicole Minetti —la higienista dental cuya íntima amistad con Berlusconi la aupó a una consejería del PDL en Lombardía— también se había quedado en una fiesta como Dios la trajo al mundo: “Solo llevaba unos zapatos plateados con diamantes”. Según la modelo, Il Cavaliere tenía armarios llenos de vestidos para que sus invitadas se disfrazaran: “Incluso tenía uno de reina”.

Lo que el tribunal de Milán trata de determinar es si al anterior primer ministro italiano se le fue la mano e incurrió en un delito de inducción a la prostitución de menores en la persona de una joven bailarina marroquí llamada Karima El Mahroud, más conocida como Ruby Robacorazones. Según las palabras de la muchacha interceptadas por la policía, participaba en las fiestas sexuales de Silvio Berlusconi desde que tenía 16 años. La relación se descubrió a raíz de que Ruby fuese detenida por robar presuntamente joyas y dinero a una prostituta. La noche del 27 al 28 de mayo de 2010, el propio Berlusconi —todavía primer ministro— telefoneó a la comisaría central de Milán y aseguró a los policías que Ruby era “sobrina” del entonces presidente egipcio Hosni Mubarak…

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_