‘Quid pro quo’
He leído estos días en EL PAÍS que el Fondo Monetario Internacional (FMI) nos ha dado el enésimo consejo definitivo para vencer la crisis y que consistiría en que me cobren algo más de IVA cuando me gaste unos eurillos en un libro o en un plátano; yo me permito solicitarle al FMI que, a cambio, propongan que también se graven con el pago de algunos eurillos (cualquier cifra que sea mayor que los cero euros actuales) esas transacciones financieras internacionales de miles de millones de euros. El FMI me dice que convendría que me rebajaran mi sueldo de funcionario (ya reducido en ocasión previa); y de nuevo, con ánimo de entendimiento y cooperación, le propongo al FMI que, a cambio, impulse con igual ímpetu salvador la clausura de los paraísos fiscales donde esconden su dinero los que tienen ingresos copiosos de otras fuentes que no son un sueldo controlado por la Hacienda Pública. Es evidente lo bien que van las cosas en Grecia gracias a los consejos del FMI, entre otros... ¿Seré un demagogo o acaso un peligroso radical de izquierdas?— Roberto A. Pazo Cid.
