Al agua antes de los 12 meses

El Consejo Superior de la Salud de Bélgica desaconseja la matronatación, una actividad que permite familiarizar a los bebés con el agua y mejorar su coordinación. En una nota advierten de los riesgos de esta práctica para menores de un año si las piscinas no cumplen con las condiciones de higiene y seguridad. Según el diario belga Le Soir, alrededor de un 15% de los niños se mete en la piscina en Bélgica antes de cumplir el año. Una práctica que se extiende por todo el continente. En España son muchos los padres y las madres que la practican. Pero ¿es una moda o una actividad aconsejable? Le pregunto a una experta, Gemma Barbany, de Crackbebèsamfibis.

Pregunta: Expertos belgas desaconsejan la natación para los bebés menores de un año. ¿Cómo lo ve?

Respuesta: Creo que muchos de los problemas derivan del hecho que la gente confunde con facilidad o hace uso de la palabra natación sin tener esta nada en común con la actividad acuática para bebés que nosotros desarrollamos. La palabra "natación", deporte o ejercicio que consiste en nadar, nada tiene que ver con la actividad que se realiza en nuestros cursos con bebés de meses a tres años. Nunca pondremos como objetivo la natación, es decir, aprender a nadar. Todo lo contrario. Nuestros objetivos son:  socioafectivo (progenitor/bebé, bebé/grupo clase y bebé/educador/a), cognitivo (cantar, aprender con música y relacionar gestos y caricias con sonidos y palabras) y psicomotriz (moverse en el agua, rodar, saltar, lanzar, recibir, salpicar, coordinar...) respetando desde el inicio el desarrollo de cada bebé, y sin otro fin que adaptarse al medio mediante el juego y la música.

P: ¿Por qué es importante la actividad acuática para bebés?

R: Nosotros, los adultos, buscamos en la actividad acuática para bebés un espacio en el tiempo que nos permita compartir el placer de estar tranquilos en compañía de nuestros hijos. La mayoría de los padres reconoce que el momento del baño en casa es el más feliz dentro de la dinámica familiar cotidiana, y por ello se sienten seducidos por un proyecto lúdico y educativo en el que los progenitores comparten sensaciones de bienestar con sus hijos y favorecen el desarrollo de las habilidades motrices y del trabajo en grupo, estableciendo nuevos vínculos afectivos. Ayuda sobre todo el ambiente relajado, positivo y de absoluto respeto hacia el niño/a que resulta fácil de introducir en el apretado horario familiar.

P: ¿Cómo ha crecido esta práctica?

R: Los adultos atrapados en una sociedad de ritmo trepidante buscamos espacios de respeto hacia el crecimiento y desarrollo madurativo de nuestros hijos. Cuanto menos tiempo tenemos para estar con ellos/as, más tendemos a refugiarnos en este tipo de actividades. En 1992 cuando inauguré mi escuela Crackbebèsamfibis, todos los bebés venían acompañados por sus mamás; en este momento podría asegurar que los bebés gozan tanto de la participación del papá como de la mamá, hecho que constata que, cuanto menos tiempo tenemos para disfrutarles, más buscamos espacios y actividades que nos permitan ese contacto piel a piel, estimulando este intercambio de sensaciones placenteras con nuestro hijo/a y reforzar así el vínculo familiar. El crecimiento en la participación de la actividad acuática para bebés responde también a la propuesta masiva de esta actividad, no siempre acertada, y que parece haberse puesto de moda en los últimos años. Aconsejo ser muy cautos en la elección del programa y de los técnicos en cuestión.  

P: ¿Por qué es importante el agua para el bebé?

R: El lactante en su vida intrauterina ha vivido inmerso en una bolsa de líquido en estado de ingravidez. El precoz  reencuentro con su madre/padre en el agua establece una relación de bienestar que refuerza directamente su confianza y le propicia el encuentro con los recuerdos intrauterinos. El agua acompaña al bebé en su desarrollo hacia la madurez.

P: ¿Qué hay que tener en cuenta antes de iniciarse en esta actividad?

R: Elegir un centro con personal técnico con formación especializada en bebés. Informarse sobre  la temperatura del agua, la ventilación del recinto y el tratamiento desinfectante. Disfrutar al máximo de la actividad y pensar que una época corta pero muy intensa y que toda experiencia debe ser siempre positiva.