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"¿Dónde están los 4.200 kilos de hachís?"

La Fiscalía de Reus pide 11 años de cárcel para un grupo delictivo que secuestró a dos personas para recuperar un cargamento de droga

Cuatro encapuchados interceptaron el vehículo de Juan Carlos C. C. en la autovía de Reus, le vendaron los ojos y le subieron a un vehículo sin dejar de golpearle y formularle una pregunta que se repitió incesantemente durante la semana que le mantuvieron secuestrado: "Dinos donde están los 4.234 kilos de hachís". La víctima y otro hombre secuestrado días después fueron retenidos y golpeados entre un domicilio de Mont-roig del Camp (Tarragona) y otro de Tarragona, interrogados y amenazados con el objetivo de que facilitaran información sobre un supuesto cargamento de droga. Hasta que sus captores los dejaron solos en el inmueble de Mon-troig del Camp y pidieron auxilio a través de una ventana, lo que permitió que fueran liberados por la policía local. La Fiscalía de Reus pide ahora 11 años de cárcel para los cuatro miembros del grupo delictivo y que la Audiencia Provincial incoe un nuevo expediente para otro autor de ambos secuestros que se dio a la fuga y permanece en paradero desconocido desde agosto del año pasado.

El paradero de las cerca de cuatro toneladas de hachís no ha trascendido, pero la fiscal de Reus considera probados dos delitos de secuestro y otros dos de lesiones con ensañamiento con los que el grupo criminal pretendía hacer confesar a los retenidos el paradero de la sustancia ilícita. El escrito de acusación también relata las amenazas que los imputados profirieron a las víctimas: desde fuertes golpes en la cabeza y el abdomen hasta advertencias de que iban a herir a sus familiares y a ser rociados con gasolina e incinerados si no aportaban información sobre el paradero de la droga.

Ajustes de cuentas

Se trata de prácticas recurrentes entre los ajustes de cuentas protagonizados por redes delictivas y que difícilmente llegan a los tribunales. "Son agresiones que no suelen denunciarse porque acarrean de forma implícita la comisión de graves delitos, como es el tráfico ilícito de sustancias estupefacientes", señalan fuentes de la Audiencia Provincial de Tarragona que piden el anonimato. Las posibles imputaciones por el presunto tráfico de droga se dilucidarán en otra causa, añaden las mismas fuentes.

Los hechos ocurrieron el verano de 2008, cuando Juan Carlos C. C. se dirigía desde una población de Reus a una localidad alicantina. El grupo criminal abordó su vehículo y le retuvo durante unos ocho días. En paralelo, el grupo secuestró a una segunda persona en l'Ampolla (Tarragona), posiblemente vinculada con la red delictiva del primer secuestrado, según fuentes judiciales. Le exigieron información sobre el paradero del cargamento de la mercancía y luego lo introdujeron en un vehículo para trasladarlo al inmueble de la ciudad de Tarragona.

Tres de los cuatro acusados son naturales de Marruecos y carecen de antecedentes penales mientras dos de ellos se encuentran en situación regular en el España. La Fiscalía también reclama una indemnización de 35.000 euros para las víctimas, que tuvieron que ser hospitalizadas para tratarse las graves lesiones en el rostro y el abdomen después de su liberación.

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