160 millones para que circulen 13.000 coches
Abierto al tráfico el anillo distribuidor bajo las cuatro torres de la Castellana, que las conecta con M-30, M-607 y A-1.- La infraestructura prevé conexiones con los intercambiadores de plaza Castilla y Chamartín
El anillo construido bajo las cuatro torres que se levantan en la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, en el paseo de la Castellana, conecta desde hoy las calles de Sinesio Delgado y Monforte de Lemos con el paseo de la Castellana, la A-1 (autovía de Burgos), la M-607 (carretera de Colmenar) y la M-30, a través de los túneles de Pío XII. Este distribuidor de la circulación, de 1,1 kilómetros y tres carriles de 3,20 metros con forma de ocho, ha sido abierto al tráfico a las 12.30 horas, después de que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, lo inaugurara oficialmente poco antes. Según las previsiones del Ayuntamiento, será utilizado por más de 13.000 vehículos diarios, con unos 4.000 durante la hora punta de la mañana y casi 3.000 en la hora punta de la tarde. Ha costado 160 millones de euros y 27 meses de obras.
El subterráneo está formado por un vial de forma rectangular con circulación en anillo en el sentido de la agujas del reloj y cuenta con cinco entradas -Monforte de Lemos, Sinesio Delgado, Pedro Rico, el paseo de la Castellana y Arzobispo Morcillo- y otras tantas salidas -Pedro Rico, Arzobispo Morcillo, ambos sentidos del paseo de la Castellana y el túnel sur de Pío XII, que facilita el acceso a la M-30 sur-. Estas entradas y salidas permitirán canalizar el tráfico procedente de la M-30 oeste y sur, la M-607, el eje de Sinesio Delgado-Monforte de Lemos-túneles de Pío XII, las zonas norte y sur del paseo de la Castellana, la A-1 y la M-11, que permite llegar hasta IFEMA y el aeropuerto de Barajas.
Además, facilitará el acceso al futuro Centro Internacional de Convenciones de Madrid, que se construirá junto a las cuatro torres y cuyos usuarios se sumarán a las 12.500 personas que se estima que trabajarán cada día en los rascacielos. Esta infraestructura también incluye ramales de conexión con otras actuaciones relacionadas con la movilidad de la capital que ya se están ejecutando o que están previstas, como el enlace transversal con la avenida de San Luis o los intercambiadores de transporte de Chamartín y plaza de Castilla, que todavía no ha entrado en funcionamiento completamente. Gracias a los nuevos túneles bajo las cuatro torres, el subterráneo de Pío XII incrementará su funcionalidad, ya que en sentido norte se ha prolongado hasta Monforte de Lemos, pasando de 800 a 1.360 metros.
Soluciones "inteligentes, integradas y seguras"
Mientras, en sentido sur ha doblado su longitud, ya que anteriormente contaba con 822 metros y ahora tiene 1.669. El anillo distribuidor ha sido construido a una profundidad de entre 6,8 y 8,5 metros bajo la calle, con un espacio libre bajo la losa de cubierta de al menos 1,20 metros para la ubicación de las instalaciones de ventilación y señalización. Los túneles cuentan con 54 cámaras de vigilancia, ocho salidas de emergencia y 96 bocas de incendio. Además, se han ejecutado diferentes trabajos en superficie, ya que se ha instalado nuevo mobiliario urbano, se han creado jardines, se han pavimentado más de 27.000 metros cuadrados de aceras y otros 94.273 de calzadas.
El distribuidor de tráfico de las cuatro torres, que delimitan el nuevo skyline de Madrid, ha sido ejecutado por OHL en unas obras que comenzaron a mediados de 2005 y han finalizado tres meses antes de los previsto, en enero de 2008. Antes de que entraran en servicio los túneles, el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, ha destacado que las torres de OHL, Sacyr Vallehermoso, Repsol-YPF y la Mutua Madrileña, "no van a suponer un colapso de la zona norte de la ciudad" porque el anillo distribuidor será capaz de absorber y repartir el tráfico que generen estos edificios. Para Gallardón, es "un paso más" para que Madrid se convierta en una de las grandes metrópolis de Europa, porque supone, junto a otros proyectos como la reforma de la M-30 o la construcción de los túneles de Pío XII, apostar por soluciones "inteligentes, integradas y seguras".
"Inteligente, por su capacidad previsora, pues aporta soluciones para una de las zonas de Madrid con mayores expectativas de desarrollo; integrada, porque absorbe el tráfico en superficie y está dotada de conexiones con otros ejes de movilidad; y segura, porque cuenta con avanzados sistemas de seguridad y su uso, exclusivo para el tráfico, no supone ningún riesgo para los viandantes", ha declarado Ruiz-Gallardón, para añadir que las cuatro torres más el Centro de Convenciones van a convertirse en el icono de la "imagen corporativa" de Madrid. Mientras, la delegada de Obras y Espacios Públicos, Paz González, que ha asistido al acto junto al alcalde, la delegada de Urbanismo y Vivienda, Pilar Martínez, y los concejales de Fuencarral-El Pardo y Chamartín, Elena González Moñux y Luis Miguel Boto, ha apuntado que esta nueva infraestructura facilitará un "futuro mejor" para la vida de Madrid.
Es "ilegal" que lo pague el Ayuntamiento, según el PSOE
El PSOE considera "contra la Ley" que el Ayuntamiento haya costeado la construcción del anillo, que además ha salido por 179 millones de euros y no por los 160 que hoy ha dicho en la inauguración el alcalde. El concejal socialista Pablo García-Rojo opina que sufragar esta infraestructura corresponde a los promotores y propietarios de los rascacielos -Caja Madrid, Sacyr, Mutua Madrileña y Grupo Villar Mir- y no al municipio, de acuerdo con los artículos 18, 21, 95 y 97 de la Ley del Suelo. García-Rojo asegura que la financiación municipal de esta obra"va contra la Ley y tiene dos consecuencias inaceptables: el quebranto del erario público" y "ahorrar dinero a los promotores ypropietarios de las torres, incrementando sus ya cuantiosas plusvalías". El PSOE se pide al equipo municipal "explicaciones inmediatas, que ponga fin a un gasto injustificado y que aplique la Ley del Suelo, de forma que sean los promotores y propietarios de las torres quienes asuman los gastos".
