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La primera crisis del euro

El Ibex cierra su peor mes desde la caída de Lehman

El recorte de Fitch da la puntilla al selectivo, que se deja un 10,8% en mayo, y lleva la prima de riesgo de España a 160 puntos básicos, cuatro menos que su récord desde la entrada en el euro

Los mercados han confirmado hoy las peores hipótesis que secundaron a la rebaja de la calidad crediticia que anunció la agencia de calificación Fitch el viernes por la tarde con una consecuencia clara: más presión contra España. La noticia, que aunque se conoció tras el cierre de los parqués sí llegó a tiempo para arrastrar a la baja al euro frente al dólar y aumentar la rentabilidad que le exigen a los bonos del Tesoro en los mercados secundarios de deuda, ha prorrogado hoy la corrección en la prima de riesgo, que ha rozado su máximo histórico. Además, también ha llevado a la Bolsa a duplicar las pérdidas del resto de Europa con una caída del 0,7%. Pérdidas moderadas pero suficientes para que el selectivo cierre en mayo su peor mes desde octubre de 2008 tras la quiebra de Lehman.

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Pese a mantener una nota "alta", España está sufriendo un mayor castigo que el resto de sus socios o que de otros Estados con igual calificación por las dificultades para superar la crisis y reducir su déficit. Así, la prima de riesgo del país, que equivale al diferencial entre los bonos a 10 años de España frente a los alemanes, de referencia, ha llegado a tocar los 160 puntos básicos, cuatro menos que su nivel más alto desde la llegada del euro que alcanzó a principios de mayo.

El repunte de la prima tiene un efecto inmediato al alza en las condiciones de financiación de las administraciones públicas y también en los precios que exigen a las entidades privadas de crédito cuando acuden a pedir dinero al BCE o al mercado interbancario. Frente a la rentabilidad del 2,6% que los inversores exigen al bund alemán, a España le cuesta un 4,23% colocar sus títulos de deuda a 10 años.

En cuanto a las Bolsas, el temor de los inversores con mayor aversión al riesgo hacia los problemas de déficit de España se ha notado en la evolución de su principal índice bursátil, el Ibex 35. Al cierre, el selectivo español se ha dejado un 0,7%, con lo que mañana abrirá en 9.359 puntos. Un leve descenso si se compara con las caídas superiores al 3% que registró la semana pasada antes de conocerse la rebaja de calificación de Fitch, pero destacable si se tiene en cuenta que en el resto de Europa solo ha caído París y apenas un 0,21%. En una jornada sin referencias de Wall Street, cerrado por festivo, al igual que el centro financiero de Londres, el Dax alemán ha subido un 0,28% y Milán un 0,35%. En cuanto al euro, la divisa europea se ha mantenido estable frente al cierre del viernes en 1,22 dólares, aunque ha transitado durante buena parte de la jornada sobre los 1,23.

A lo largo de mayo, mes en el que han tenido lugar las sucesivas rebajas de calificación de los países de la eurozona con mayores problemas de déficit como Grecia, Portugal y España, lo que ha supuesto una nueva fase en la crisis fiscal del euro, el Ibex se ha dejado un 10,8% o 1.132 puntos. Con este retroceso, el selectivo ha registrado su peor mes desde octubre de 2008 tras la caída de Lehman Brothers con los bancos al frente de las pérdidas.

La confianza de los consumidores europeos rompe en mayo con la tendencia al alza

Los últimos datos e indicadores económicos que se van conociendo del área euro muestran un cambio de tendencia con respecto a la leve mejora registrada en el primer trimestre del año al calor del recrudecimiento de la crisis fiscal y de déficit de los países que comparten la moneda única. Hoy le ha tocado el turno a la confianza de los consumidores y empresarios ha roto en mayo una racha de varios meses de subidas consecutivas y volvió a deteriorarse tanto en la zona euro como en el conjunto de la UE y en España, según ha informado hoy la Comisión Europea.

El indicador de Sentimiento Económico (ISE) bajó tanto en los países de la moneda única (-2,2 puntos, hasta 98,4), como en la UE (-1,9 puntos, hasta 100) y España, donde el indicador descendió hasta los 88,7 puntos desde los 92,6 registrados en abril pasado, tras siete meses de subidas consecutivas.

El Ejecutivo comunitario precisa, sin embargo, que la comparación de los datos con la de meses anteriores no es del todo exacta debido a que el indicador ha sufrido este mes "un cambio en la clasificación de las actividades económicas", "lo que supone una ruptura de la serie", si bien sólo ha afectado a la "magnitud del cambio de tendencia, no a su dirección".

Por sectores, sólo mejoró el sentimiento económico en la industria, desde -7 a -6 en la zona euro, y de -7 a -5 en el conjunto de la Unión Europea (en España empeoró de -14 a -15), mientras que descendió en los otros sectores, como los servicios, la venta minorista y la construcción.

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