Osalan investiga las causas del último accidente laboral

Las caídas en altura en la construcción y los aplastamientos en el sector primario son dos de las principales causas de muerte en los accidentes laborales. Los tres trabajadores que han fallecido en lo que va de agosto responden perfectamente a ese patrón. Primero fue una caída en altura en el colegio La Salle de San Sebastián, el pasado martes día dos. Un trabajador georgiano de 50 años irregularmente contratado cayó desde el tejado, a cinco metros de altura, y falleció casi en el acto.

El pasado miércoles día 17 murió otro trabajador, el autónomo Roberto Gracia Fernández, de 45 años, al ser aplastado por un palé que se desprendió de la mordaza de la que estaba suspendido. El accidente sucedió en la obra de construcción del edificio del Igualatorio Médico Quirúrgico, IMQ, en Zorrozaurre, Bilbao. Osalan investiga si el palé que le mató se soltó accidentalmente por el mal estado del enganche o se rompió por un exceso de peso.

El tercer accidente se produjo apenas veinticuatro horas después de este último, el pasado jueves. El conductor de una retroexcavadora falleció cuando examinaba el cabezal que tenía que cortar un árbol. El informe de la autoridad laboral, emitido ayer mismo describe que "el trabajador", Milton E.A., que apenas si llevaba once meses en la empresa Telmo Pires, con nueve empleados, se disponía a cambiar el detector del medidor de longitud del tronco a cortar. El citado medidor se encuentra en el cabezal de la máquina, una retroexcavadora de la marca Kumatsu 210.

"Por causas no determinadas se cerraron las mordazas del citado cabezal y atraparon al trabajador, causando su fallecimiento", describe el técnico de Osalan. Las mordazas le atraparon la cabeza, provocando su fallecimiento prácticamente en el acto también.

Osalan abrió ayer mismo una investigación para dilucidar si la máquina desbrozadora estaba en marcha cuando el trabajador manipulaba el cabezal cortador, o si al destrabar alguna de las cuchillas que habían quedado atascadas se accionó el mecanismo y la máquina le atrapó.

En lo que va de año se han registrado en Bizkaia 17 muertes en accidente laboral, según los datos que maneja Osalan. "Pese a que la cifra baja año a año un sólo muerto ya es demasiado", aseguró ayer la directora de Osalan Pilar Collantes, quien atribuye una parte de la reducción de la siniestralidad a los esfuerzos que se están haciendo en prevención, En el País Vasco han fallecido 36 trabajadores en 2011, tres de los cuales eran autónomos, uno por cada territorio. En 2010 murieron 39 hasta agosto para acabar el año en 62. Julio y agosto suelen ser dos meses con una elevada siniestralidad para tratarse de un periodo en el que la gran mayoría de los trabajadores se va de vacaciones.

Medio centenar de miembros de ELA, LAB, STEE-EILAS, EHNE e Hiru exigieron ayer a Osalan, la Inspección de Trabajo y la Fiscalía que "depuren responsabilidades" tras el accidente laboral mortal ocurrido del miércoles en las obras del Igualatorio Médico Quirúrgico (IMQ). En la misma participaron el padre, el hijo y una sobrina del trabajador muerto en el accidente.