Derechos televisivos contra "interés general"

El clásico del fútbol canario que enfrentará al Tenerife y a la Unión Deportiva Las Palmas el próximo domingo 23, a las 12.00 (hora peninsular) en el estadio Heliodoro Rodríguez López, llega envuelto en la polémica. El Gobierno de Canarias ha decidido, mediante decreto, que el encuentro sea declarado de interés general, por lo que deberá ser emitido en abierto a pesar de que Canal + ya había elegido el encuentro para su retransmisión. El canal tiene la facultad de elegir de forma preferente el partido de Segunda que prefiere emitir cada semana.

En el documento enviado a los clubes, y al que ha tenido acceso EL PAÍS, se justifica la declaración del clásico canario como de interés general dada la "gran trascendencia social para el mundo del deporte en Canarias". El Gobierno canario se ampara en un decreto de 2008.

En este sentido, la consejera de Educación y Deportes del Gobierno de Canarias, Milagros Luís Brito, aseveró que ha recibido instrucciones precisas para ordenar la declaración del partido de interés general y permitir "un marco de acuerdo con clubes y operadores sin afectar los intereses de ninguna parte y que el partido se pueda disfrutar desde todos los hogares de Canarias".

La postura del Gobierno de Canarias ha cogido por sorpresa a la Liga de Fútbol Profesional (LFP). Su secretario general, Carlos del Campo, aseguró a este periódico no tener conocimiento del decreto ni de la intención del ejecutivo canario de declarar el derbi de interés general. "El horario del partido es el que es, ya está definido el partido de interés general para el sábado 22, y además la ley solo permite el establecimiento de un partido de interés general", indicó Del Campo.

Fuentes del Tenerife aseguran que acatan la elección del horario realizada por la Liga y muestran su "respeto" con su operador televisivo, ya que el conjunto blanquiazul tiene vendidos los derechos televisivos a Audiovisual Sport.

Por otra parte, Las Palmas intentó, antes de que la Liga fijara el partido para el domingo, que el encuentro se disputara el sábado, lo cual perjudicaba los intereses de Canal +, e incluso intentó tener la complicidad del Tenerife para protestar ante la Liga. Entre los argumentos de Las Palmas se encontraban "motivos de seguridad".