El languideciente Gobierno de Irlanda logró ayer que el Parlamento aprobara el anunciado ajuste presupuestario del que depende que llegue el primer tramo de la prometida ayuda internacional de 85.000 millones de euros.
La crisis financiera ha revelado las insuficiencias de la regulación del sector financiero, mucho más avanzado en sus prácticas y en sus tecnologías de lo previsto hace solo unos años por el legislador. Incluso las sanciones vigentes para quienes violen la normativa varían extraordinariamente en los Veintisiete.
Los administradores concursales han cifrado el déficit patrimonial del grupo de agencias de viajes Marsans en 373 millones de euros.