Una novela para la era Obama
Hace unas semanas la revista Time le dedicó la portada. Camisa negra, barba de dos días, pelo ondulado entreverado de las primeras canas, gafas negras de montura discretamente elegante, tras cuyos cristales se percibe la mirada atenta de unos ojos claros, la mirada de alguien que ha radiografiado su país de manera incisiva e inmisericorde, sin dejar nada sin registrar.