_
_
_
_
_
Entrevista:LUIS CASTILLA | Presidente de Acciona Agua

"El Gobierno no cumple el Plan de Calidad de las Aguas"

Es conocido por todos que el agua es insípida, incolora e inodora. Pocos saben, en cambio, que para que el agua que llega hasta la boca de sus grifos sea insípida, incolora, inodora y, en la mayoría de los casos, potable, ha pasado antes por una serie de complejísimos procesos sostenidos por costosas infraestructuras.

El presidente de Acciona Agua, Luis Castilla (Burgos, 1960) es, posiblemente, la persona de España que mejor entiende el esfuerzo que ello supone. La empresa, especializada en depuración, reutilización y desalación opera en todo el mundo, da trabajo a más de 2.000 empleados y facturó el año pasado 438 millones de euros. Tiene experiencia en más de veinte países, entre ellos EE UU, Reino Unido, Australia, Dubai o Chile. Hasta la fecha ha construido más de 400 plantas de tratamiento de aguas potables.

"Hay países en los que la gente no sabe que bebe agua reutilizada"
"La desalación es parte de la solución para que no se agoten los cauces"

Es un sector fructífero, pero con un futuro incierto: la sequía de cauces y pantanos y la crisis económica, que ha frenado las subvenciones públicas, ponen las cosas cada vez más difíciles a las empresas de tratamiento de aguas. Acciona Agua ha apostado por vías alternativas como la reutilización y la desalación, proceso en el que ya son punteros, como avalan sus numerosos premios internacionales.

Pregunta. ¿La desalación será la solución a la sequía en el futuro?

Respuesta. La desalación provee agua apta para beber, para regadío y para usos industriales. Y ya está implantada en muchos países, pero es un complemento, no la solución definitiva. La solución será una combinación de desalación y reutilización.

P. Defina reutilización.

R. Coger el agua consumida en ciudades por industrias y personas, depurarla y volverla a ofrecer de nuevo.

P. Son aguas residuales, que han pasado antes por los estómagos de otras personas.

R. Exacto. Y ya hay costes muy competitivos para lograr que vuelva a ser apta para beber.

P. ¿Y por qué no está más extendido este sistema?

R. Para empezar, el tercer mundo no lo puede pagar, ni eso ni algo tan sencillo como clorar el agua. Y los países desarrollados que sí pueden pagarlo tienen que vencer tabúes. La gente no quiere beber agua que antes ha bebido otro, aunque te diré que se hace en muchos sitios donde la gente no es consciente.

P. No me lo diga. ¿Yo bebo agua reutilizada?

R. No, pero por ejemplo, en Tejas [EE UU], el agua de los ríos, antes de llegar al mar, ha pasado por seis o siete ciudades que la cogen y la sueltan. En países musulmanes no se hace: va en contra de su religión, porque interpretan que beben la sangre de otra persona.

P. Los grupos ecologistas critican la desalación.

R. Es cierto que el gasto energético es mayor. Pero no cuentan que así no agotamos los cauces, un problema al que hay que enfrentarse. Estamos acabando con corredores ecológicos, ecosistemas enteros. ¿Por qué agotar un río que está a cien kilómetros, si tienes el mar al lado?

P. ¿Afecta la crisis a algo tan básico como el agua?

R. La debacle de la construcción ha provocado una bajada preocupante en las inversiones de las comunidades autónomas y la Administración central. Y muchos ayuntamientos que antes contrataban a un socio privado para mejorar el servicio, ahora lo hacen con la única intención de captar fondos. Muchos buscan el pelotazo.

P. Pero el Gobierno tiene en marcha un Plan Nacional de Calidad de las Aguas. ¿No es un balón de oxígeno para el sector?

R. El problema es que no lo está cumpliendo. Empezó en 2007 con un presupuesto en torno a los 19.000 millones de euros y tiene que finalizar dentro de cuatro años. Pues bien, hasta la fecha solo ha ejecutado un 5%.

P. Su empresa prevé elevar su facturación al doble en 2013. ¿Pecan de optimismo?

R. No, porque tenemos muchas cosas a nuestro favor. Para empezar, somos de las pocas compañías que ofrecen un servicio integral: construimos, operamos y asesoramos. Podemos hacer cualquiera de estas cosas o las tres a la vez. Un banco, a la hora de dar financiación, valora mucho que sea una sola empresa la responsable de todo. Además, estamos en un continuo proceso de internacionalización.

P. ¿Una huida hacia delante como reacción a la crisis?

R. No, nosotros ya sabíamos que los fondos europeos tenían fecha de caducidad. Hace tiempo que se reconoce nuestro peso en el mercado internacional. Este año hemos recibido el premio a la mejor empresa de agua del mundo por la publicación Global Water Intelligence, la biblia en el sector. Hace nueve años que empezamos en otros mercados: África, Sudamérica, EE UU y Europa. Ahora entramos en Egipto, México, Brasil y Colombia. Luego iremos a por India.

P. ¿No se olvidan de China?

R. Es complicado. Allí lo imitan todo, desde ropa hasta plantas de tratamiento de agua. Te piden que construyas una planta para servir a 200.000 habitantes y luego ellos levantan una similar, pero adaptada para servir a cinco millones. Aunque tarde o temprano tendremos que entrar en ese mercado, aún lo estamos estudiando.

El presidente de Acciona Agua, durante la entrevista.
El presidente de Acciona Agua, durante la entrevista.SAMUEL SÁNCHEZ

La agenda de Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para entender su alcance.
RECÍBELO EN TU CORREO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_