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Reportaje:La pretemporada

El dinero, antes que Guardiola

La directiva del Barça cede a la presión de los organizadores y, en contra de la opinión del técnico, acepta alinear a Messi en Seúl

Jordi Quixano

Pep Guardiola, el técnico del Barcelona, fue contundente ayer en Seúl. "Messi no juega", aclaró sin reparos. Ante la creciente preocupación de los periodistas y el gesto torcido de los organizadores del partido, se reafirmó: "Solo ha realizado un entrenamiento, ha llegado con uno o dos kilos de más y es un riesgo que juegue. Si lo hace, es para saludar a la gente". Pero la directiva, por segunda vez desde que Sandro Rosell asumiera en julio las riendas del club, hizo oídos sordos a sus advertencias. Messi jugará hoy (13.00, TV-3) al menos un cuarto de hora contra un combinado de la K-League surcoreana.

Antepuso Guardiola la salud del jugador al dinero. No alinear a Messi durante un mínimo de 30 minutos suponía dejar de ingresar unos 200.000 euros de los dos millones que recibirá el Barça por disputar el encuentro. Un contrato que los organizadores se saltaron a la torera, poco atentos con las firmas. Enojados y furiosos con la decisión del técnico azulgrana, se reunieron con miembros del Barça durante dos tensas horas cuando ya se superaba la medianoche. Amenazaron con no emitir el encuentro y retirar los patrocinios de la gira al tiempo que los aficionados aseguraban que devolverían las entradas. La directiva dio su brazo a torcer, sabedora de que habrá más giras asiáticas y de que no le interesa que se tambalee una fuente de ingresos segura. Fue una decisión política, no deportiva. Una decisión institucional en contra de los intereses del equipo. Messi, tratado como un objeto, jugará un cuarto de hora. Una decisión salomónica para todos menos para Guardiola.

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Ya es la segunda vez que la directiva azulgrana actúa en contra de los intereses del técnico, que no quiso vender este verano a Chigrinski -cobraron 15 millones por el traspaso del central al Shakhtar, ucranio-, pero se le impuso hacerlo para salvar las nóminas de los empleados. Ahora, juega Messi por narices. "Vista la buena evolución del jugador tras el último [y único] entrenamiento y teniendo en cuenta que el equipo hará otro antes del partido, los técnicos han creído oportuno que el delantero argentino pueda disputar unos minutos en este enfrentamiento", dijo el club en un comunicado oficial a través de su web. "El extraordinario recibimiento con el que los aficionados surcoreanos han acogido al Barcelona", añadió, "y la enorme expectación creada son algunos de los motivos que se han tenido en cuenta para que el jugador tenga presencia en este amistoso".

Otro frente abierto para Guardiola es la ida de la Supercopa ante el Sevilla, el 14 de agosto. Si la federación española cita a los internacionales para el amistoso contra México (11 de agosto), el equipo se quedaría a medias, sin poder preparar el duelo. "No sé si seremos siete para jugar", ironizó el entrenador.

Pep Guardiola, ayer durante el entrenamiento del Barcelona en Seúl.
Pep Guardiola, ayer durante el entrenamiento del Barcelona en Seúl.ASSOCIATED PRESS

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