El Consell acepta la financiación del Gobierno pero amaga con recurrirla
El Ejecutivo central pagará el 70% de los 1.245 millones adicionales en enero
La consejera de Justicia y Administraciones Públicas, Paula Sánchez de León, aceptó ayer en nombre del Consell la nueva financiación autonómica pese a que la considera "insuficiente" y sitúa a la Comunidad Valenciana "a la cola de la financiación per cápita". Tras firmar el acuerdo en el Ministerio de Cooperación Territorial, la portavoz de Francisco Camps amagó con recurrir el acuerdo, una vez estudiado por los servicios jurídicos de la Generalitat.
Sánchez de León explicó que, según el Gobierno, el acuerdo supondrá una transferencia adicional de 872 millones por parte de la Administración del Estado. Esta cantidad supone el 70% de los 1.245 millones de euros adicionales que ingresará la Generalitat con la nueva financiación, según los cálculos del Ministerio de Economía. El dinero, correspondiente a 2009, se abonará previsiblemente el próximo mes de enero.
Toda la oposición culpa a Camps de no haber sabido negociar
Alarte, insatisfecho porque no se llega a la media, aunque hay "un avance"
La representante del Consell se quejó de la imprecisión del Gobierno a la hora de fijar la cantidad adicional para 2009 conforme a los criterios del nuevo sistema. "El pasado sábado nos comunicaron una cantidad vía telefónica de 878 millones como anticipo de 2009, que preveo que no se ingresarán antes del 31 de diciembre, y hoy nos han dicho en la reunión que eran 857, pero cuando hemos manifestado nuestro estupor por esa cantidad, nos han mostrado un papel que cifra la cantidad en 872, por tanto, no sé todavía la cantidad exacta". "El Consell estudiará ahora detenidamente la cantidad", prosiguió Sánchez de León, "y solicitaré a los servicios jurídicos que evalúen que se han atendido los principios constitucionales de igualdad, solidaridad, suficiencia financiera y lealtad institucional".
Para la representante del Consell, que se abstuvo en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, la nueva financiación -1.245 millones de euros más, según el último cálculo del Ministerio de Economía- "está muy lejos de los 1.300 millones de euros que se barajaron inicialmente y, desde luego, no tiene nada que ver con los 1.500 millones de los que habló el PSPV-PSOE la semana pasada".
El secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, empezó ayer por mostrar su insatisfacción con el hecho de que "la financiación per cápita de los valencianos sea inferior a la media española", aunque añadió que el nuevo modelo es "un avance" que viene a corregir problemas del modelo anterior como la "perversión" de "negar que había cinco millones de valencianos". Alarte recriminó a Camps "la retórica fácil y el victimismo estéril" que lo han hecho "incapaz de defender los intereses de los valencianos y las valencianas, de hacer una propuesta rigurosa, sustentada por un amplio apoyo de las Cortes que lo hiciera creíble ante el Estado y el Gobierno de España". El líder socialista señaló que seguirá insistiendo en "la imperiosa necesidad" de alcanzar la media de las comunidades autónomas.
La coordinadora y portavoz en las Cortes de Esquerra Unida, Marga Sanz, aseguró que el proceso de negociación de la financiación autonómica "se cerró con un déficit democrático" por la bilateralidad. Reconoció que "se ha hecho un esfuerzo para introducir el criterio de población" pero su materialización mantiene el déficit per cápita. Sanz añadió que el Consell "no ha negociado como debía. Su propio victimismo le ha perjudicado porque, al final, ha acabado por enrocarse".
Enric Morera, dirigente del Bloc y portavoz de Compromís pel País Valencià, calificó el de ayer como "un día triste y negro para el pueblo valenciano". Según dijo, el Consell ha cometido "una claudicación" al aceptar "una financiación surgida de la marginación a la que el PSOE somete al País Valenciano". El dirigente nacionalista explicó que la primera iniciativa de Compromís en las Cortes esta legislatura fue para promover un gran acuerdo en materia de financiación. "Alarte tenía que haber actuado de manera más clara", dijo Morera. "Se ha evidenciado la falta de peso político de nuestro país". Por su parte, el Consell "ha demostrado su debilidad y el peso de la deuda que ahoga a la Generalitat". "¿Cómo pretendía una negociación seria el PP si ha llegado a declarar a Zapatero en las Cortes 'enemigo público número uno?", se preguntó.
