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Próximamente en su teléfono

El filme 'Rage', de Sally Potter, llega a la vez a salas, DVD y móviles

Toni García

"Unas 150.000 libras". Con esa cantidad, cerca de 180.000 euros, la realizadora británica Sally Potter (1949, Londres) ha conseguido embaucar a Judy Dench, Jude Law, John Leguizamo, Dianne Wiest o Steve Buscemi para su próxima película, Rage. No pasará a la historia del cine por sus estrellas o la simpleza de su argumento (un bloguero graba con su móvil a los participantes en un desfile de moda), sino por su modelo de distribución. "Desde la primera semana, el internauta se ha podido bajar los webisodes, siete, desde nuestra web a su móvil. Luego, aparece en el Reino Unido e Irlanda y se pone online en modalidad stream en nuestra página" cuenta a EL PAÍS vía telefónica Karol Martesko, responsable de la división cinematográfica de babelgum.com.

"Hay que rascar el presente y mirar el futuro", dice la directora

Potter, que cuenta con gran predicamento entre los cinéfilos gracias a filmes como Orlando o La lección de tango, llegó a un acuerdo con la plataforma para que su película se distribuyera, de forma gratuita, a través de la Red, incluyendo móviles (opción que también funciona desde España) coincidiendo con su salida en DVD y cines. Una propuesta arriesgadísima, financiada por la cineasta. "Hice una segunda hipoteca sobre mi casa para pagar el proyecto, pero no me arrepiento para nada, porque estaba convencida de que debía hacer esta película. Estamos en un momento de terrible recesión económica. Tenemos que encontrar nuevas maneras de hacer películas. Formas más baratas que sigan siendo relevantes, y que nos hagan volver a las cosas que realmente importan: la gente y su verdad", afirma Potter en conversación telefónica desde su oficina en Londres.

Reconoce que no son muchos los que están dispuestos a arriesgarse con propuestas semejantes: "Hay una cierta nostalgia en nuestro universo sobre lo que debe ser el cine puro, y eso provoca que nadie mire hacia adelante. Hay que rascar el presente y mirar hacia el futuro. Dejar que la gente pueda mirar Rage en sus teléfonos móviles y en Internet totalmente gratis, es ir en la dirección contraria a la paranoia y al afán de legislación de los grandes estudios".

"Aún no disponemos de cifras pero sabemos que el programa que permite visionar la película en el móvil ya tiene miles de descargas", explica Martesko. Confía en que "esto ayudará a cambiar el paisaje por lo que respecta a la distribución de películas. Esto es un paso en lo que yo creo es la dirección correcta. En Estados Unidos e Inglaterra la distribución en salas de cine se está encogiendo a marchas forzadas y es cada vez más difícil entrar en ese circuito. Y si lo logras, puede que tengas una o dos semanas para mostrar tu película. Después va a desaparecer. Lo que nosotros proveemos es tener tu película online durante dos años disponible en Internet o en tu teléfono móvil, y que el espectador pueda volver a verla cuando le dé la gana".

En la misma línea, Potter cree que "la manera de distribuir esta película es coherente con la película en sí misma". "Vemos siete días al bloguero tratando de contar su historia, así que tenía lógica que tratáramos de distribuir la película de la misma forma, en el mismo plazo. Es un reflejo exacto del relato. Por la tonalidad, el ritmo y el formato de la historia estaba convencida de que funcionaría muy bien en teléfonos móviles y en pantallas reducidas y al final la decisión fue sencilla".

Un fotogramas de <i>Rage</i>. Lily Cole.
Un fotogramas de Rage. Lily Cole.
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