A veces las comparaciones no son tan odiosas como dice el refrán. El desplome de la economía española en el primer trimestre del año fue terrible. Tanto que aunque la caída ha continuado durante el segundo, casi parece un alivio que lo haya hecho a un ritmo menor.
Si se quieren batir las previsiones nada mejor que situar las expectativas en niveles poco exigentes. Los resultados de las grandes empresas cotizadas han sido mejores de lo esperado, lo que tiene su reflejo en el fuerte rebote que acumula la Bolsa en las últimas dos semanas, pero todavía muestran signos de gran debilidad.
La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha decidido sancionar a las compañías Repsol, Cepsa y BP -que controlan el 70% de las 8.650 gasolineras del país- con 7,9 millones de euros por fijación indirecta del precio de venta al público de sus estaciones de servicio.