El heredero oculto
El secreto rodea a Kim Jong-un, educado en Suiza y aficionado al baloncesto
La foto muestra a un niño con el flequillo recortado en forma de arco, los ojos directos hacia la cámara -aunque el derecho ligeramente estrábico- y una sonrisa algo forzada. El chaval tenía entonces 11 años. Se trata de Kim Jong-un, el tercer hijo varón de Kim Jong-il y supuesto sucesor del líder norcoreano en el trono de la única dinastía comunista del mundo.
Bueno... es Kim Jong-un si las declaraciones de un cocinero japonés que asegura que trabajó al servicio del dictador norcoreano -experiencia sobre la que escribió un libro- son ciertas. Kenji Fujimoto, seudónimo literario del chef, hizo público el retrato en la televisión japonesa. Dice que le fue entregado poco antes de regresar a Japón en 2001. Hasta ese momento, no había ninguna imagen conocida del menor de los vástagos de Kim Jong-il.
La propaganda ha comenzado a llamarle 'Brillante Camarada'
Poco se sabe de Kim Jong-un. Su vida, como la de todo el clan Kim, es secreto de Estado. El libro de Fujimoto es una de las pocas fuentes con las que cuentan los servicios de inteligencia de EE UU y Corea del Sur, que se esfuerzan por constituir el dossier sobre el joven heredero desde que el verano pasado Kim Jong-il sufriera un ataque cerebral.
El deterioro de la salud del llamado Querido Líder, de 67 años, ha provocado inquietud sobre potenciales luchas de poder y explicaría el endurecimiento de la postura de Pyongyang el último año. En abril, lanzó un misil de largo alcance; en mayo, realizó el segundo ensayo nuclear de su historia y, a principios de julio, disparó dos baterías de misiles. El dirigente norcoreano puede estar reforzando su poder para garantizar la sucesión familiar.
Kim Jong-un tiene 25 o 26 años. Es hijo de Ko Young-hee, actriz y bailarina, tercera pareja de Kim Jong-il, fallecida en 2004 de un cáncer. Estudió en Berna (Suiza) entre 1996 y 2000, bajo el nombre Pak Un, según el periódico japonés Mainichi Shimbun. El director del centro asegura que era un excelente estudiante. Una de sus profesoras recuerda que era "tranquilo" y parecía rodeado de "un velo de misterio". Un día dejó la escuela sin previo aviso. De vuelta en Pyongyang, ingresó en la Universidad Militar Kim Il-sung, donde se graduó en 2007.
A Kim Jong-un le gustan el baloncesto, la música occidental y dibujar cómics, según el periódico japonés, que cuenta cómo en una ocasión el joven norcoreano invitó a un compañero portugués, llamado João Micaelo, a ver un partido de la NBA estadounidense en París. Kim le confesó quién era y le mostró una foto con su padre. Según el cocinero japonés, Kim Jong-il dijo de su hijo una vez: "Este chico es como yo".
La prensa japonesa y la surcoreana afirman que ha comenzado a ayudar a su padre al frente de la Comisión Nacional de Defensa, el órgano que supervisa el poderoso Ejército norcoreano, de 1,2 millones de soldados, y ha sido nombrado responsable de la agencia de espionaje. Además, la máquina de la propaganda ha comenzado a llamarle Brillante Camarada, un indicio de que está destinado a suceder a su progenitor.
