_
_
_
_
_

Unos penales y otros

La falta del certificado de penales impidió al matrimonio bolivano avanzar en nada, según el discurso envolvente de la Tenencia de Alcaldía, que obvia considerar que tuvieron que solicitarlo a Bolivia (natural demora) y que, en todo caso, ya era fehaciente a primeros de mayo. Esta onmipresencia del citado requisito contrasta con la facilidad con la que la propia Tenencia de Alcaldía ha pasado sobre el origen del problema.

El accidente se produjo cuando unos operarios instalaban el tendido de luces navideñas y, tensando un cable enganchado al balaustre del balcón, lo precipitaron sobre el cochecito de Alejandra que pasaba por allí. No se habían adoptado, ni ahí ni en otros lugares, las medidas de seguridad fijadas para esos trabajos. El ayuntamiento los viene contratando desde el mandato de Corina Porro con una empresa, Gedemón, que no está asociada a Instalectra, organización empresarial que garantiza la solvencia profesional de los asociados. Gedemón subcontrató la tarea con Vicalfri, dedicada a fontanería y calefacción, y sobre ninguno de estos extremos ha facilitado el ayuntamiento la menor explicación.

Tampoco su compañía aseguradora ha comparecido en el juzgado para dirimir las responsabilidades del accidente y asumir los cargos. De momento se lo pelotean las aseguradoras de Banesto (propietario del balcón), de la comunidad de propietarios del edificio y de Gedemón.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_